El acusado que ‘tiró de la manta’ en el Caso Poniente no declarará

La sala de vistas habilitada en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Aguadulce acogió este viernes la quinta sesión de interrogatorios en el juicio del denominado Caso Poniente, que estudia una presunta trama corrupta en El Ejido.

La cita anunciaba la expectativa de un punto de inflexión, con las declaraciones de los acusados Manuel Caballos y Miguel Ángel Ruiz Baena. Sin embargo, ninguno de ellos respondió finalmente a las preguntas de las partes por motivos distintos.

Manuel Caballos era el gerente de la sociedad mixta de Elsur y, según las declaraciones anteriores de los miembros del Consejo de Administración, el encargado de realizar los subcontratos de servicios. En palabras del consejero Miguel Ángel Abad el martes, “el señor Caballos tenía plenos poderes para subcontratar”.

Su papel es nuclear para entender el caso, según las acusaciones, porque las subcontratas de Elsur se utilizaron presuntamente para desviar fondos públicos mediante facturas engordadas o servicios inexistentes.

Ahora bien, contra pronóstico y con la oposición de las defensas, la declaración de Caballos se trasladó al próximo martes y no pudo responder a las alusiones directas de los miembros del Consejo de Administración, compañeros en la bancada de los acusados.

Más problemático es incluso la situación de Miguel Ángel Ruiz Baena. La comparecencia del antiguo director financiero de Elsur se esperaba con enorme interés tras sus declaraciones en la fase de instrucción. Baena había manifestado a la magistrada instructora Monserrat Peña que tenía constancia de trabajos de Elsur en propiedades “particulares” vinculadas a  Juan Enciso, ex alcalde de El Ejido, y José Alemán, ex interventor municipal en El Ejido.

La ratificación de su testimonio era determinante para las acusaciones, porque Baena había ‘tirado de la manta’ sobre trabajos de reforma a particulares con recursos de Elsur. Entre ellos habló de obras en la casa del gerente Manuel Caballos, en propiedades de familiares de José Alemán o en la sede del PAL (partido de Juan Enciso).

Sin embargo, Miguel Ángel Ruiz Baena solicitó ayer no declarar. En el mismo momento en que se anunciaba su interrogatorio (después de un breve receso en la sesión), su letrado anunció que el acusado se acogería a su derecho a no declarar.

Para evitar que la decisión se interpretara como una voluntad de entorpecer el esclarecimiento del caso, el letrado presentó un informe médico donde, según su explicación, se argumentaba que Baena había sufrido un ictus y tenía problemas para comunicarse y recordar.

Dos acusados
El procesado se sentó en la silla reservada para las declaraciones y respondió una única pregunta a la magistrada Társila Martínez, presidenta del tribunal. “¿Va a declarar?”. “No”.  Luego se marchó por su propio pie y la sesión se dio por concluida sin una sola palabra sobre aquellas aseveraciones sobre 'favores' de Elsur a los principales acusados en el Caso Poniente.

Para el próximo martes se ha anunciado la comparecencia de Manuel Caballos, Juan Enciso y José Alemán, por este orden, aunque parece improbable por la densidad de los interrogatorios que se pueden llevar a cabo todos en el mismo día.
Durante este viernes, prestaron declaración José María Caballos, vocal del Consejo de Administración de Elsur e hijo del ex gerente, y Jaime Rico, antiguo director financiero.

El primero se liberó de cualquier responsabilidad en la gestión de la empresa mixta, mientras el segundo aseveró que su papel en la dirección financiera de la entidad estaba centrada de manera primordial en buscar el equilibrio entre cobros y gastos, en un contacto de grave crisis económica en Elsur, pero que desconocía si los trabajos se efectuaban de forma real por las subcontratas.