Fue el pasado mes de marzo cuando el hasta ayer ministro de Transportes, José Luis Ábalos, decidía por fin hacer una visita oficial a la provincia de Almería. Fue la primera y también la última, dejando 2026 como promesa para la llegada de la alta velocidad, el retomar el tráfico ferroviario en la capital lo antes posible, el compromiso de sentarse a hablar con Ayuntamiento de Almería y Junta de Andalucía para ver la futura financiación de la segunda fase del soterramiento, y la promesa de que habría un encuentro para decidir el futuro de la antigua estación entre ADIF y el Consistorio.
Muchos compromisos estos que quedaron apuntados en la agenda de los políticos y de la sociedad almeriense y que ahora, tras cuatro meses sin grandes avances, le va a tocar asumir a la nueva cabeza visible del Ministerio de Transportes, la ex alcaldesa de Gavà, Raquel Sánchez.
De momento la concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, espera su llegada para que “sea receptiva a las peticiones que llegan de Almería”. Considera la edil que “el ministro Ábalos no ha hecho lo que se esperaba de él, no ha sido lo suficientemente diligente y espero que venga otra persona con otro talante y que sea bueno para Almería”.
Esa persona, Raquel Sánchez, tendrá que culminar la negociación de la financiación del soterramiento con Martínez Labella. Unas negociaciones que se están manteniendo pero que no pasan del nivel técnico y siguen necesitando el empujón político definitivo.
Y también ella tendrá que dar el visto bueno definitivo a la decisión que se tome sobre el futuro de la estación. Un futuro que está pendiente de un encuentro comprometido por Isabel Pardo de Vera, presidenta de ADIF, en su visita en marzo pero que, a pesar de haber solicitado por carta que se materialice en dos ocasiones por parte del alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, no se ha producido ni tiene fecha.
Compromiso
Considera Martínez Labella que a pesar del cambio “no puede haber borrón y cuenta nueva, se tendrán que asumir los compromisos ya adquiridos”.
Por su parte desde la Mesa del Ferrocarril quieren dar margen de confianza a la nueva ministra aunque prefieren no hacerse demasiadas ilusiones.
Eso sí, desde la Mesa esperan que “su gestión sea más cercana a los ciudadanos que la que ha mantenido el señor Ábalos en el tiempo en el que ha sido ministro, un tiempo en el que la Mesa le solicitó por activa y por pasiva una reunión, sin que finalmente se haya producido en ningún momento”.
Solicitan así a Raquel Sánchez que “sea más receptiva que su antecesor y demuestre el respeto que cualquier servidor público debe a los ciudadanos, en este caso a los almerienses que, desde hace veinte años, no ven más que promesas incumplidas, recortes en las inversiones y ‘retoques’ en el proyecto de la línea de alta velocidad de Almería con el Corredor Mediterráneo”.
Cita
Ante esta situación van a solicitar formalmente que Raquel Sánchez que “venga a Almería a la mayor brevedad posible y se siente con la sociedad civil -la Mesa es la voz de más de 220 organizaciones, colegios profesionales, instituciones y colectivos ciudadanos- para explicar la situación de cada una de las obras y proyectos que siguen pendientes de resolución. Entendemos que es lo mínimo que se merece una tierra que ha demostrado su ‘santa paciencia’ ante los retrasos, los recortes y los desplantes de todos los gobiernos y sus representantes”, aseguran.
Habrá que esperar a que la ex alcaldesa de Gavà se ubique en su nuevo ministerio pero en Almería ya la están esperando como agua de julio o agosto.
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