Los contenedores vuelven a emerger en Artés de Arcos

Los contenedores han vuelto a la superficie en la calle Artés de Arcos. Lo hacen a pesar de que las obras realizadas en esta calle recientemente había confeccionado dos islas de contenedores soterrados en las calles General Moscardó y Doctor Aráez Pacheco siguiendo el criterio que hasta ahora ha mantenido el Ayuntamiento de la capital en las intervenciones realizadas tanto en Oliveros como en Nueva Andalucía o en el centro histórico con el objetivo de quitar de la vista de los turistas y ciudadanos la basura.

Explican desde el Consistorio que se trata de una actuación que se ha llevado a cabo después de que los vecinos lo hayan solicitado, y bien es cierto que ha habido protestas de la situación en la que se encontraban las hileras de contenedores soterrados que acumulaban cartones, bolsas y suciedad.

Parece que esas críticas y la petición de que se encontraran más repartidos los contenedores por el barrio  son los que han llevado al área de Sostenibilidad Ambiental a volver a tirar de contenedores en superficie.

Problemas
Más allá de que este regreso suponga un nuevo cambio en la política que se lleva desde hace unos años por parte del Ayuntamiento en cuanto a la gestión de los residuos, la nueva presencia de los contenedores ha traído una nueva complicación: quita dos plazas de aparcamiento. Si ya la remodelación redujo el número da plazas en el entorno, ahora este nuevo cambio vuelve a suponer una nueva reducción en unas calles que se saturan durante las mañanas al encontrarse cerca de la actividad administrativa con edificios de la Junta de Andalucía y de la Diputación Provincial. Además, la presencia de un centro educativo también complica la situación a las horas de entrada y salida.

Sea como sea, lo cierto es que los contenedores tanto de residuos como de reciclaje han vuelto a la calle José Artés de Arcos y lo que toca preguntarse es lo que va a pasar a partir de ahora. ¿Seguirá la política de ubicar islas soterradas en cada nueva actuación municipal? ¿Ocurrirá lo mismo en otros barrios en los que los vecinos también están descontentos con el grado de mantenimiento de sus islas de contenedores soterrados? Tocará esperar para ver las decisiones.