Pateristas consiguen condenas más leves gracias al buen estado de las lanchas

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha rebajado las penas de prisión para dos pateristas acusados de transportar inmigrantes a través de la ruta argelina hasta Almería. Los procesados corresponden a dos causas independientes, pero reproducen una misma tendencia judicial que, como avanzó LA VOZ, está golpeando de manera reiterada las decisiones de la Audiencia Provincial de Almería sobre los traficantes de personas en el Mar de Alborán.

El TSJA considera que las pateras estaban “en aceptable estado de conservación” y dotadas de potentes motores fueraborda. Por tanto, no cree que tenga que aplicarse el delito agravado por el riesgo para la vida de los migrantes que viajaban a bordo.

El tribunal resume esta posición apelando a la reforma del Código Penal del año 2015 y señala que hay que examinar cada caso de manera individual. “Se impone en cada caso una apreciación individual y detallada de las condiciones de la embarcación y de las restantes circunstancias de la travesía, sin que la importante reducción de pena del tipo básico operada en la reforma de 2015 pueda llevar inconscientemente a una rebaja paralela de las condiciones para apreciar el peligro concreto que exige el subtipo agravado”.

Dicho de otro modo, los jueces de Almería aplican la condena más grave porque observan un peligro real para los migrantes, pero el TSJA están rebajando las condenas porque, a menudo, entienden que las pateras están en condiciones “aceptables”.
Esto tiene que ver directamente con el cambio de paradigma en la inmigración en el Mar de Alborán. Las grandes pateras de subsaharianos fletadas en Marruecos, generalmente lanchas en condiciones muy precarias, sobrecargadas y con motores pequeños, han sido sustituidas por barcas de fibra, rápidas y sólidas emanadas de las costas de Argelia.

En la primera sentencia, el TSJA evalúa la acusación contra un argelino identificado como Y., responsable de patronear una embarcación de cinco metros la madrugada del 22 de mayo de 2020. El paterista llevó a los migrantes hasta la Cala Invencible de la localidad de Villaricos (Cuevas del Almanzora). Luego emprendió el viaje de vuelta a Argelia. En su fuga fue perseguido y arrestado por el buque Río Segura de la Guardia Civil  y una embarcación semirrígida.

La Sala de lo Civil y lo Penal baja la pena de cuatro a solo un año de prisión tras entender que tenía elementos de seguridad como una bomba de achique eléctrico, un GPS y una brújula.

Carboneras

En el segundo caso, el acusado Z. fue detenido por patronear una nave de seis metros de eslora y dos metros de manga con “mas de diez personas en su interior”. Fue localizado por personal de la patrullera Río Jiloca de la Guardia Civil el 23 de marzo de 2021. “A gran velocidad se dirigía rumbo a la Playa de los Muertos de Carboneras, donde embarrancó y descargó a todas las personas menos al detenido y a otro viajero”.

El TSJA cambia su condena de cinco años de prisión por un año por el mismo motivo. “Se encontraba dicha embarcación en buen estado, siendo resistente al estar construida con fibra de vidrio, contando con un motor potente hasta el punto de que la patrullera que lo perseguía no la pudo alcanzar”, subraya el tribunal, “no puede entenderse acreditada la existencia de un riesgo para la vida”.

En este proceso contra Z. la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Almería había incluido en los hechos probados una referencia expresa a las estadísticas confirmadas de personas fallecidas en el Mar de Alborán, un párrafo poco común en este tipo de sentencias.