El Hospital Vithas Almería ha celebrado un 'aula de salud' con motivo del Día Internacional del Cáncer de Mama y para promover la concienciación, prevención y análisis de esta enfermedad desde un punto de vista científico, divulgador y personal.
Este taller forma parte de la iniciativa de Vithas de formar e informar a la sociedad sobre aspectos relacionados con el cuidado de la salud como parte de su compromiso con la sostenibilidad empresarial.
El acto fue introducido por Pilar Espejo, gerente del centro, que estuvo acompañada por Magdalena Cantero, presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en Almería, y como ponentes por los doctores del equipo médico de oncología, ginecología oncológica y cirugía de la mama, formado por los doctores de Vithas Almería Gabriel Fiol, Renato Salguero y Antonio Moreno Nin, que fueron los encargados de ampliar en detalles las distintas fases del cáncer de mama con el hilo conductor de una historia personal de una paciente.
Y es que la jornada, celebrada la tarde de este miércoles en el salón de actos del hospital, contó además con el testimonio de Violeta Rodríguez, médica e investigadora en Vithas Almería que ha vivido el cáncer de mama en primera persona, en edad muy temprana, a los 28 años, y además un tipo de tumor no solo en estado avanzado, sino también de muy mal pronóstico por sus características.
Emotivo testimonio
Rodríguez compartió un emotivo testimonio de sus vivencias con todos los asistentes, empezando por el día en que le comunicaron la noticia de su enfermedad, hasta su calidad de vida actual después de pasar por procesos quirúrgicos y tratamientos, que han conseguido finalmente su recuperación.
“De pronto te cae una losa y la vida no vuelve a ser lo mismo para ti. Pero afortunadamente no somos números, porque si así fuera yo no estaría aquí, porque me habría muerto”, reconoció, ante las expectativas que le dieron tras su diagnóstico.
En una amena conversación con el cirujano Antonio Moreno Nin, Violeta informó y emocionó a los asistentes, que casi llenaron el salón de actos. Ambos contaron cómo consiguió aprender a "convivir con el miedo y la cercanía de la muerte", y a "agradecer cada día nuevo que amanece".
También coincidieron en criticar la “tiranía del optimismo”, es decir la que viene a tratar de infundir al paciente la idea de que “si estás siempre alegre te curarás, y si estás triste fracasarás”.
El optimismo no cura
Antonio Moreno se mostró duro sobre esta teoría: “El optimismo no cura”, insistió, de forma que a su entender el paciente tiene todo el derecho del mundo a expresar sus sentimientos, a sentir miedo o tristeza y a desahogarse.
“Una actitud positiva puede ayudar, pero el optimismo por sí mismo no cura”, concluyó Violeta Rodríguez, quien finalizó expresando su agradecimiento a la AECC por todo el apoyo recibido, también a través de talleres para pacientes, actividades y charlas. “Yo estaba en mi tema de que solo mi positividad era suficiente, pero vi que no”, porque también es necesaria la ayuda exterior, y sobre todo de los profesionales sanitarios", manifestó.
Magdalena Cantero le tomó la palabra sobre este asunto e informó de que una de las primeras tareas que ha acometido en la asociación ha sido la de reclamar a los profesionales “que estén involucrados” al máximo con los pacientes, y que éstos, “que son personas vulnerables que no saben qué les va a pasar mañana, por lo que necesitan de acompañamiento y que cuenten con sus médicos como aliados”.
Ponencias
Tras la intervención de la paciente, los tres doctores ofrecieron sus ponencias. El primero en hacerlo fue el cirujano Antonio Moreno, quien destacó que el tratamiento quirúrgico del cáncer de mama es multidisciplinar, y que a la intervención en sí se une un tratamiento complementario que suele ser de quimioterapia, radioterapia y terapia hormonal. Además, señaló que tras una intervención siempre hay que ofertar una reconstrucción inmediata.
A continuación, el oncólogo Renato Salguero habló de la importancia de la primera visita a la consulta de oncología médica, “que es de lejos la más importante y la más larga”. En ella se explica al paciente paso a paso su diagnóstico, se resuelven sus dudas y se expone “el tratamiento, los efectos secundarios y las expectativas”. Igualmente informó sobre los objetivos y fines del tratamiento por quimioterapia antes o después de la intervención quirúrgica.
Gabriel Fioll
“La supervivencia actual del cáncer de mama en España se encuentra cercana al 90 %, lo que supone más de medio millón de mujeres que han sido tratadas y sufren los efectos del tratamiento además su angustia personal. Los profesionales nos encontramos en la obligación de ofertar no sólo las mejores terapias oncológicas sino también las actuaciones más relevantes que mejoren la calidad de vida de estas mujeres. La sequedad vaginal provocada por los tratamientos condiciona molestias, sangrados y dificultad en las relaciones de pareja. La osteoporosis también puede incrementarse por estos tratamientos", explica el doctor Fiol, de la Unidad de Ginecología Oncológica de Vithas Almería, quien fue el último en intervenir.
Entre otras cuestiones, Fioll abordó el tratamiento de la atrofia vulvo-vaginal, una patología que surge como efecto secundario de algunos tratamientos utilizados para hacer frente al cáncer de mama, y que se debe principalmente a la disminución de los niveles de estrógeno, lo que provoca sequedad vaginal.
Por último, los doctores también resaltaron, a preguntas de una de las personas del público, la importancia de la alimentación. El doctor Fioll concluyó que el estilo de vida puede reducir en buena medida la posibilidad de sufrir un cáncer.
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