No es la primera vez, quizá tampoco sea la más ofensiva, pero sí que el último acto vandálico que se ha producido en la exposición que desarrolla el Colectivo Fotográfico ‘Desencuadre’ al aire libre en el carril saludable del Paseo de Almería, tiene el deshonroso mérito de ser el que estrena esto de romper las obras en exposición en la capital. Algo que ya pasó hace unos días con la muestra Rodalquilarte en Níjar, cuyas lonas amanecieron rajadas.
Se daba a conocer el acto vandálico en las redes sociales de Carlos de Paz, presidente del Colectivo, en la que mostraba su estupefacción ante un hecho que había acabado con la rotura de una obra “impresa sobre un material cerámico rígido” y sobre la que habría que ejercer una importante fuerza para conseguir que se rompa.
El propio presidente del colectivo ha sido el encargado de presentar denuncia ante la Policía Local y espera que se pueda localizar al responsable de este acto vandálico.
Otros hechos
Pero lo cierto es que no es la primera vez que se maltratan las obras que se exponen en este espacio del Paseo de Almería. Ahora ha sido una rotura, pero como bien explican desde Desencuadre, fue hasta más duro el contemplar en algunas de las fotografías de la exposición ‘Familia Animal’ como se insultaba a las cuidadoras de algunos animales de una forma incomprensible.
También se pintaron , aunque en menor medida, algunas de las piezas que FOCOAL expuso durante la Semana Santa.
Y es que el problema del vandalismo es algo que se ha ido arraigando en la ciudad y, en algunos casos como en la muestra de la ‘Familia Animal’, muestra además actitudes de odio y de falta de respeto.
Desde el Ayuntamiento de Almería ya han anunciado que procederán a reponer la obra tal y como debe estar, aunque de momento no hay una fecha clara ya que hay que volver a confeccionarla.
El concejal de Promoción de la Ciudad, Jesús Luque, de quien depende la muestra, lamenta una situación que se repite en la ciudad a veces con el arte y otras veces con el mobiliario.
Sea como sea, lo cierto es que este tipo de comportamientos se han instaurado en la sociedad almeriense desde hace un tiempo y ante la dificultad de coger a los que los cometen salvo que haya cámaras o se les pille mientras lo realizan, acaban en una impunidad que les hace autores no tener miedo.
Reclama Carlos de Paz que ante esta “barbarie” que actos vandálicos hay que poner en valor “la educación, la cultura y el respeto” y pedía que no se insultara ante este hecho. Y es que ante aquellos que solo destrozan, solo cabe educación.
Una historia ya antigua
El vandalismo en las piezas artísticas en la ciudad lo estrenó la escultura de John Lennon. A este le pintaron, le rompieron la gafas, la guitarra y lo marearon cambiándolo de sitio hasta encontrar un espacio en el que la gente lo abrace solo para hacerse fotos .
El heredero en esto de sufrir la visita de los amigos de hacer daño de forma gratuita ha sido el emigrante retornado que colocado en la subida de Pablo Iglesias sufrió el corte de una pierna, le robaron la maleta, el brazo... en fin, todo un vía crucis para una figura que podría representar a nuestros abuelos o los primos que vuelven de América.
A pesar de esto, la única forma de luchar es que no ganen ellos la batalla y que no las quiten.
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