¿Servía para algo hacer la mili?

La mili te quitaba al menos un año. Era un paréntesis absurdo en el mejor momento de tu vida

Soldados del cuartel de la Misericordia desfilando delante de la puerta de la iglesia de San Sebastián. Año 1961. Foto de Fausto Romero.
Soldados del cuartel de la Misericordia desfilando delante de la puerta de la iglesia de San Sebastián. Año 1961. Foto de Fausto Romero. La Voz
Eduardo de Vicente
21:03 • 31 jul. 2023

Cuántas veces hemos escuchado esa frase que decía “que falta te hace una mili” o la de “en la mili te vas a hacer un hombre”. Y cuántas veces hemos oido discutir sobre si había que quitar la mili o volverla a poner. Todo el mundo ha opinado de la mili aunque no la haya hecho.



En lo que hay una extraña coincidencia es que un alto porcentaje de los que hicieron el servicio militar mitifica ese periodo cuando han pasado los años. Se olvidan de los malos momentos, de la lejanía, de las órdenes absurdas y de la obediencia gratuita y del año de juventud tirado a la basura y lo envuelven todo en una capa de nostalgia que maquilla la auténtica realidad. La mayoría de los que recuerdan con alegría la mili lo que de verdad añoran no es el periodo pasado en el ejército, sino aquel tiempo de juventud irrepetible.



¿Servía para algo hacer la mili? Quizá, para aquellos muchachos que con veinte años estaban en tierra de nadie, que ni estudiaban ni tenían pensado trabajar, la mili les venía bien para vivir una experiencia distinta, viajar, conocer nuevos amigos, pasar buenos ratos de juerga bebiendo en la cantina de la tropa y salir a enamorar adolescentes los domingos por la tarde en la discoteca. 



Sin embargo, la mili era un mazazo para aquellos que estaban estudiando y para los que habían empezado a dar sus primeros pasos en el mundo laboral. La mili era un paréntesis de al menos un año si no tenías la desgracia de que tocara en la Marina, una etapa en blanco en uno de los mejores momentos de tu vida. Cuando estabas decidiendo tu futuro llegaba el momento de aparcarlo todo para convertirte en un soldado sin vocación alguna, en una marioneta de cuartel donde siempre encontrabas a alguien por encima tuya dispuesto a darte una orden y obligándote a que la cumplieras. Curiosamente, en el servicio militar casi nunca te cruzabas con un oficial que se fijara en un humilde recluta, por lo que tu jefe inmediato era un simple cabo primero, harto de mili y de chuscos, que proyectaba sus frustraciones metiéndole el miedo en el cuerpo a los reclutas.



Casi todo el que cuenta sus historias de la mili habla de que tuvo suerte, de que le tocó un buen destino, pero se olvida de recordar los momentos amargos vividos y ese precio tan alto que tuvo pagar en nombre de la patria a una edad en la que poco nos importaban las banderas, el sentimiento patriótico y el ardor guerrero que se cantaba en el himno de artillería.



La mili servía para que un joven conociera el sabor amargo de la impotencia, el dolor de la lejanía, el perfume a podrido de una disciplina medieval que trataba de poner orden en un universo disparatado. Sí, la mili era un auténtico disparate en el que los soldados aprendíamos la técnica del escaqueo permanente para no vivir continuamente en esa atmósfera de irracionalidad. Cualquier imbécil, por llevar un galón cosido en la camisa, tenía el derecho de humillarte sin que tuvieras posibilidad de defenderte. La mili te iba embruteciendo de tal modo que cuando uno entraba en el olimpo de los veteranos y había dejado atrás casi todas las referencias de la vida civil, podía caer en la tentación de putear a los pobres reclutas que temblando de miedo y con cara de pardillos llegaban nuevos al cuartel.



El día que nos licenciábamos, cuando por fin te daban la blanca, que era la ansiada cartilla militar que certificaba que habías cumplido tu deber con la patria, lo festejábamos como si fuera el día más feliz de nuestras vidas. Todos vivíamos así aquel momento de euforia, lo que demuestra que esa sensación que adquieres con el tiempo, de que en la mili fuiste feliz, es tan solo un espejismo.




Temas relacionados

para ti

en destaque