Ya hay fecha para cortar el paso por la pasarela de la estación

El próximo lunes, 11 de diciembre, la pasarela peatonal que une la rotonda Manuel Fraga y la calle La Marina quedará cortada al paso de los peatones para iniciar su demolición. Así lo indica un cartel ubicado en la propia pasarela que deja claro a los usuarios de este puente que dentro de tan solo tres días tendrán que cruzar al otro lado de la ciudad a través del Parque de la Estación o si lo prefieren, por el puente de la Avenida del Mediterráneo. Usuarios entre los que se sitúan muchas familias ya que son varios los centros educativos a un lado y a otro del puente, y todos correspondientes a la misma zona escolar.

Hay que tener en cuenta que estos trabajos de demolición se realizan para poder abrir por esta misma zona un vial que sirva de prolongación de la calle La Marina hasta la propia Carretera de Ronda, vía por la que se realizará la entrada de los vehículos hasta la estación de autobuses provisional que se está ejecutando sobre el espacio que hasta hace unas semanas ocupaba la playa de vías en la parte trasera de la antigua estación de ferrocarril.

La pasarela peatonal que actualmente luce de blanco aunque tradicionalmente estaba pintada de ese rojo característico de todo el conjunto de infraestructuras necesarias para la descarga del mineral de hierro que hasta los 90 llegaba a la ciudad desde las minas de Alquife, se inauguró la tarde de un 30 de mayo de 1984 cuando se terminó de colocar la iluminación pertinente, aunque bien es cierto que ya llevaba unos meses abierta al tránsito. Se levantó siguiendo un diseño de técnicos de Renfe realizado ocho años antes (lo de que los proyectos tarden mucho en ejecutarse en Almería no es algo nuevo) y con un recorrido que no era exactamente el previsto ya que pasaba sobre la zona de trabajo de la llegada de los convoyes y se tenía que en algún momento estorbara y tuviera que modificarse. Ahora, más de 39 años después podemos decir que no estorbó porque duraron poco esos trenes con sus vagones llenos de mineral entrando en la estación.

Símbolo
A partir de ahí, y teniendo en cuenta que durante años los vecinos de El Tagarete, Ciudad Jardín y El Zapillo se había jugado el tipo cruzando por medio de las vías para poder llegar al 'otro lado' de la ciudad, esta pasarela se convirtió en el nexo de unión entre las dos Almerías, y eso que los días de viento tan habituales por aquí, había que agarrarse fuerte a esos hierros rojos no tanto para no salir volando como para evitar el mareo con el temblor de esa infraestructura levantada con hierro y hormigón.

Una vez que las obras del soterramiento en esta segunda fase culminen, la ciudad seguirá estando dividida desde la Avenida del Mediterráneo (punto en el que comenzará a emerger el ferrocarril) hasta la nueva estación de tren ubicada en la misma intermodal actual. Allí nacerá una nueva pasarela porque los almerienses tendrán que seguir salvando la brecha. Se trata de la que se va a ubicar a la altura de la calle Elio Antonio de Nebrija, que se levantará sobre la rampa del soterramiento y contará con un ancho libre de 5 metros y un vano de 23,9 metros sobre el ferrocarril. Su estructura se resuelve con dos vigas longitudinales de hormigón pretensado de 1,40 metros de canto en sus laterales, conectadas mediante placas alveolares trasversales de 0,20 metros de canto.

Tras la demolición de la pasarela peatonal de la estación llegará la demolición del puente de Los Molinos que no necesitará esperar a que se produzca el corte de tráfico ferroviario. Caerán en este proceso de soterramiento el paso soterrado de La Goleta, el puente de la Avenida del Mediterráneo y el de la Autovía.