El emotivo hasta luego de un local referente del ocio almeriense

Este pasado Día de Reyes no fue un sábado más en el centro almeriense. Uno de sus más exitosos locales de ocio nocturno de la ciudad acogió una madrugada de fiesta con sabor a despedida, donde las emociones se hicieron notar tanto en los rostros de su personal como en los de los clientes más fieles. Y es que este lugar referente de la noche echa su persiana de forma temporal. 

Decenas de personas han publicado en sus historias de Instagram desde hace unos días vídeos e imágenes de dicha noche, también fotografías más antiguas de sus momentos para el recuerdo en este local, ubicado en Poeta Villaespesa, o posando con algún miembro del staff. Porteros, camareros, encargados, deejay y una asidua clientela forman una auténtica familia: La Clásica.

La marcha nocturna almeriense quedará huérfana de uno de sus mejores sitios durante mínimo tres meses, ya que hasta abril este popular local permanecerá cerrado por obras. Aunque por ahora sigue siendo una incógnita qué se hará exactamente en su interior, todo hace indicar a que el cambio de imagen de La Clásica va a ser más que considerable, con una actuación que modificará su fisionomía.

Decenas de personas acudieron a partir de la medianoche del sábado al domingo para disfrutar de la "última fiesta", como bien anunciaba el propio local en sus redes sociales. Se proyectaron varios vídeos, uno en el que salían todos los trabajadores que han pasado por La Clásica en los últimos años y también clientes, y otro que realizaron los chicos y chicas de la Asociación Almeriense para el Síndrome de Down (Asalsido), en el que deseaban que abrieran pronto de nuevo este local al que van todos los viernes. 

Exceptuando la época de restricciones durante la pandemia de COVID-19, esta será una de las veces de toda su historia, que no es poca, en la que este negocio permanezca cerrado durante más tiempo. Bien es cierto que no es la primera vez que se realiza alguna reforma o modificación en su interior, aunque al parecer en esta ocasión la actuación será de mayor alcance.

Los almerienses tendrán que esperar hasta la primavera para volver a tomar algo en La Clásica y conocer su nueva cara. También tardarán más de lo previsto en conocer este histórico negocio de la fiesta almeriense los Erasmus que aterrizan estos días en Almería para el siguiente cuatrimestre, puesto que no hay que olvidad que es punto de encuentro y uno de los lugares favoritos para salir de los estudiantes extranjeros, al igual que Fun Corner, en El Zapillo.

En lo que al local se refiere, se sitúa en el bajo de un edificio cuya construcción data del año 1880. En dicho espacio estuvo, entre otras cosas, la sede del Frente de Juventudes de Almería hasta mediados del siglo XX y el Bugatti, pub predecesor de un La Clásica que abrió sus puertas a los almerienses en marzo de 1992. Más de tres décadas alegrando las noches de la ciudad.