La decisión de Vox de retirarse de los cinco gobiernos autonómicos que compartía con el Partido Popular ha generado un terremoto político en España. Apenas un año después de la formación de estos ejecutivos en Castilla y León, Murcia, Extremadura, Comunidad Valenciana y Aragón, Vox ha optado por la ruptura, motivada por desacuerdos sobre la acogida y reubicación de 300 menores migrantes en diferentes comunidades autónomas.
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha defendido la gestión de su comunidad en cuanto a la acogida de menores migrantes, destacando la "responsabilidad, el compromiso y la solidaridad con la que Andalucía atiende a todos los niños y niñas que llegan". Moreno subrayó que este enfoque es una "línea roja" para el PP que no se puede traspasar.
A las puertas del Mercado Central, en su Almería, Antonio Repullo, secretario general del PP en Andalucía, respaldó la postura del presidente de la Junta. Acompañado por la alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez, y el presidente de la diputación y del PP en la provincia, Javier A. García, Repullo insistió en la necesidad de una estrategia clara del Gobierno de España. "Debe dejar de improvisar y de dar bandazos con el tema de la inmigración", reclamó, subrayando la preocupación del PP por la falta de una política coherente y bien definida en este ámbito.
Repullo afirmó que "Andalucía y los andaluces tienen el sentimiento y la responsabilidad de ser solidarios con aquellos niños y niñas que lo necesitan, que vienen a nuestra tierra y que tienen necesidad de ser atendidos, de ser queridos y de tener sus necesidades cubiertas". Enfatizó que, como mencionó Juanma Moreno, los andaluces "tienen un corazón grande" y necesitan exportar esa solidaridad con todas las garantías humanitarias posibles.
El número dos de los ‘populares’ en Andalucía destacó que el deseo de ayudar es una seña de identidad del PP, estableciendo una línea roja que no permitirán que nadie cruce. Repullo también resaltó la necesidad de "más recursos en cuestiones sanitarias, de educación afectiva y sociales" para los menores migrantes, que a menudo llegan en situaciones dramáticas tras haber pasado verdaderos calvarios.
Frente a esta postura, Repullo criticó la actitud de los "socios independentistas de Pedro Sánchez", acusándolos de negarse a acoger a un número insignificante de menores migrantes. Asimismo, el dirigente popular señalaba que si Vox "es capaz de romper un pacto por 300 menores, tiene un problema".
La ruptura de Vox con el PP en los gobiernos autonómicos no solo resalta las diferencias entre ambos partidos, sino que también plantea interrogantes sobre el futuro de las políticas y alianzas a nivel regional y nacional. Con el PP reafirmando su compromiso con la acogida de menores migrantes y reclamando una estrategia coherente del Gobierno de España, el escenario político se reconfigura, presentando nuevos desafíos y oportunidades para ambos partidos.
El secretario general del PP andaluz ha remarcado que "en Andalucía lo tenemos muy claro", y su presidente, Juanma Moreno, "lo dice alto y claro", que "la línea roja del Partido Popular de Andalucía y del Gobierno de Juanma Moreno no es otra que ayudar a aquellos que lo necesitan con ese gran corazón que tienen todos y cada uno de los andaluces, para dar respuesta a necesidades humanitarias, con garantías humanitarias".
El presidente del PP en la provincia de Almería, Javier A. García, ha expresado su agradecimiento por la visita de Antonio Repullo a la ciudad y ha hecho un llamamiento a la moderación y al sosiego en medio de la convulsión política actual. García subrayó que tanto los almerienses como los andaluces demandan tranquilidad y estabilidad en este momento crítico para el panorama nacional. "Precisamente, Andalucía representa esa templanza que la sociedad necesita ahora mismo", afirmó García.
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