Un vecino de Almería denuncia el hundimiento de su calle

"A mí mujer le llegó a decir un obrero que no sacásemos a los niños o a los perros en el jardincillo que tenemos con porche por peligro de derrumbamiento", cuenta Jorge Matilla. Teme por su casa, en la que en los últimos días se le han dibujado unas grietas "muy feas". De igual forma, también la acera frente a su vivienda se ve afectada: "Se está hundiendo", dice Matilla, que asegura estar bastante seguro de que se debe a las obras llevadas a cabo en su barrio.

Hace dos años que la empresa Aqualia comenzó dichas obras en la calle Bosnia. El objetivo era sustituir por unas nuevas las viejas tuberías de cobre, algunas oxidadas por el paso del tiempo. "El problema es que lo han ido haciendo a trozos: primero una parte de la calle, meses después otra...", explica Matilla. De esta forma, la vía se encuentra en obras la mayor parte del tiempo. El vecino lamenta también el ruido que esto acarrea: "El domingo por la noche se pusieron con el martillo neumático. Lo que deberían hacer es poner la tubería de una sola vez".

Al parecer, las mayores consecuencias las viven los vecinos que viven cerca del cruce entre la Calle Bosnia y la Calle Ruanda, una bocacalle en la que se encuentra la vivienda de Jorge: "A quienes más nos afecta es a mi vecino y a mí. Han tenido que levantar la calle entera y nuestra pared, temblando".  Matilla se empezó a preocupar cuando un día llegó de trabajar y se encontró con un pequeño derrumbamiento junto a su casa. "Me topé con un grupo de hombres trajeados que se echaban la culpa entre ellos", recuerda, antes de contar que, ante sus quejas, le dijeron que diera parte a su seguro, a lo que él se negó. 

En el barrio, donde la mayoría de calles están cortadas con vallas de seguridad, apenas se puede caminar ya con normalidad. Jorge lamenta que cada vez que llega a su casa de trabajar se encuentra "una cosa, al día siguiente algo peor y al siguiente una raja de un lado a otro de la acera". Tampoco se explica que haya tenido que llegar un obrero a decirles clandestinamente que tengan cuidado con su porche, porque nadie más los "ha avisado".

La respuesta del Ayuntamiento

El concejal de Aguas y Zonas Verdes, Juanjo Segura, se ha desplazado hacia el lugar durante la tarde de este martes para interesarse por la situación. Tras hablar con la empresa encargada de la obra, Aqualia, esta le ha asegurado que el hundimiento de la zona se debe a que el barrio era antes una zona de ramblas, lo que significa que el suelo bajo el asfalto no es compacto y, por ende, al actuar sobre el terreno, se producen los hundimientos. "No es la primera vez que ocurre esto, pero si la obra repercute de forma negativa en las viviendas de la zona, se subsanarán los daños", ha confirmado el Ayuntamiento.