Marcha en recuerdo de la desbandá

Almería ha sido el punto elegido para poner fin a los actos que, desde hace más de un mes, se llevan a cabo en distintos puntos de Andalucía para homenajear a las víctimas del franquismo durante su trayecto desde Málaga a Almería hace ya 77 años, en lo que se conoce como la desbandá y durante el que murieron miles de civiles cuando huían.

Una marcha iniciada en el barrio de Pescadería y que ha concluido junto a los refugios de la Guerra Civil con la lectura de un manifiesto, ha servido para recordarlo rodeado de banderas republicanas.

Al acto ha acudido el director de Memoria Democrática, Luis Naranjo, quien ha manifestado que su presencia y la de un centenar de personas buscaron  “rememorar la trágica huida de Málaga a Almería, lo que fue un crimen para la humanidad; recordando cómo salieron 150.000 personas de allí, unas llegaron,  otros tantos miles se quedaron por el camino y muchos de ellos siguieron huyendo hacia Cartagena y hacia Francia”.

La idea, según Naranjo, es que aquellos hechos no se olviden y continuar pidiendo justicia; “pero, sobre todo, que se conozca en España entera, porque fue seguramente el episodio más trágico de la Guerra Civil Española, que ya es mucho decir”.

Exhumaciones
Por otro lado, Naranjo ha explicado que la Dirección General de Memoria Democrática pretende asumir el coste de las exhumaciones pendientes en Almería. “Hay que tener en cuenta que estamos en un periodo de crisis, de recortes impuestos por el Gobierno central y que, por tanto, los recursos económicos que podemos destinar a las exhumaciones y a otros campos de la memoria no son los que nos gustaría, pero son más que los que dedican otros, como el Gobierno, que destina cero euros”, dijo.

Se refirió asimismo a la futura Ley de Exhumaciones, que “propondrá un plan cuatrienal y anual de exhumaciones para que no haya esperar mucho más tiempo para llevarlas a cabo”.

En lo que se refiere a la eliminación de condenas procedentes de juicios sumarísimos durante la Guerra Civil, Naranjo ha aclarado que “no depende de la Junta”. “Lo único que podemos hacer es lo que estamos haciendo, unir la voz de la administración y la calle”, señaló.

“Parodias” 
Para el, el Estado español debería asumir los tratados de justicia internacional. “Los juicios sumarísimos fueron legales, pero no justos. Mucha de la gente que huyó de Málaga, después volvió y fueron juzgados en unos juicios que fueron una parodia”, criticó. Insistió en que la marcha celebrada en Almería tiene dos sentidos: “El primero, rememorar lo que ocurrió, recordar a las víctimas, honrarlas y también recordar a los verdugos; pero también exigir que el Estado elimine los juicios sumarísimos y que se constituya una Comisión de la Verdad”. “Que no lo digo yo, sino la ONU, que también dice que debería estar presidida por una autoridad del Estado, para que sea una verdad oficial”, concluyó.

Por su parte, Rafael Salazar, responsable de la Oficina de la Vicepresidencia, recordó que “los fascistas bombardearon a los malagueños que venían a Almería” y señaló que los valores por los que perecieron “no deben ser olvidados por las generaciones venideras”.

La lectura de un manifiesto cerró los actos de recuerdo de la Desbandá por este año.