El centro Javier Peña hace de ‘Papá Noel’

Ni un sólo niño sin juguetes esta Navidad. El trabajo y el esfuerzo de los miembros de la Unidad de Estancia Diurna Javier Peña se traduce durante estos días en decenas de sonrisas y juegos entre los niños que más las necesitan, y es que más de un centenar de juguetes fabricados en este centro se han repartido entre el Complejo Hospitalario Torrecárdenas y la Asociación Amar y Vida.

Juguetes

Entre los lotes de juguetes, los pequeños podrán disfrutar de clásicos puzzles, dominós de colores, trenes, muñequitos y apilables, todos ellos realizados en madera con materiales reciclados en un 90% y “fabricados por unas manos especiales y destinados a ser jugados por unas manos también especiales”, como señalaba Nicolás Navarro, director del centro.

Aunque el valor comercial que adquieren estos productos en el mercado podría alcanzar los 1.100 euros, el valor sentimental se hace incalculable. “Estos días son para estar en familia, con ilusión; algo complicado para un niño que tiene que ser ingresado; arrancar una sonrisa es algo muy satisfactorio”, apuntaba la directora gerente de Torrecárdenas, Francisca Antón.

Además el centro Javier Peña cumple una doble labor social, “por un lado contribuye a la integración social de 70 personas con discapacidad y por otro ofrece recursos y material de apoyo a colectivos que desarrollan su labor en el ámbito de los servicios sociales”, destacaba Alfredo Valdivia, delegado provincial de Políticas Sociales.

Valor  

Con la importante labor que sus miembros realizan  también se pone en valor la capacidad de trabajo que tienen. Y es que más allá de estos preciosos juguetes, la unidad también fabrica mobiliario de oficina y elementos decorativos en multitud de materiales.