La desigualdad es mayor en mujeres con discapacidad

El informe Olivenza elaborado por el Observatorio Estatal de la Discapacidad desgrana que en 2014 las personas con discapacidad han seguido siendo víctimas de discriminación en acceso al empleo, la formación reglada o la participación social. Una situación que se agrava en el caso de las mujeres con discapacidad.

El documento, presentado por la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad (FAAM), expone, por ejemplo, que el porcentaje de mujeres con discapacidad que tienen un empleo es muy inferior al de los varones.

En este sentido, María Jesús Pérez, presidenta de la Asociación para la promoción de la mujer y niña con discapacidad, Luna, aboga por “un aumento de la tasa de empleo y la no precariedad laboral, ya que actualmente los contratos que se realizan no benefician la inclusión”. 

En materia de educación, la situación no mejora. El informe establece que el nivel de estudios en mujeres con discapacidad es inferior al de hombres, un 7,5% de mujeres no sabe leer o escribir frente a un 5,5% de los hombres. En enseñanza superior, y según datos de la Universidad de Almería (UAL) en el presente curso hay matriculados 215 estudiantes con discapacidad, 118 hombres y 97 mujeres.

Pérez explica que, “a pesar de estas cifras la situación es cambiante cuanto más se acerca el informe a estudios superiores, donde las tasas de mujeres en las universidades públicas supera a la de los hombres, dato que se está dando en el último lustro y que coincide con el incremento de mujeres en general que llegan a la universidad” y añade que “las razones son varias. Por un lado, el cambio de mentalidad de la familia y por otro, las ayudas técnicas que aporta el sistema educativo”.