La Junta“ahoga” económicamente a los Centros Especiales de Empleo

El retraso en el pago de las subvenciones por parte de la Junta de Andalucía a los Centros Especiales de Empleo (CEE) está provocando graves problemas económicos a las distintas asociaciones de personas con discapacidad de Almería que los gestionan. A modo de ejemplo, la Consejería de Empleo adeuda a la Asociación de Personas con Discapacidad “El Saliente” más de 500.000 euros en concepto de subvenciones. Esta cantidad es solo la punta del iceberg, puesto que son numerosas las asociaciones que administran este tipo de centros, como la FAAM o Verdiblanca, que no reciben las ayudas autonómicas desde hace más de año y medio. En total, la Junta de Andalucía ha dejado de abonar a las distintas asociaciones que gestionan los Centros Especiales de Empleo cerca de dos millones de euros.

Trabajadores Más de un millar de personas con discapacidad trabajan en las decenas de Centros Especiales de Empleo existentes en la provincia de Almería. “Mantener estos empleos y ayudar a encontrar oportunidades laborales para las personas con discapacidad es uno de los principales objetivos que tenemos”, asegura el presidente de la Asociación de Personas con Discapacidad “El Saliente”, Matías García. Las ayudas para estos centros resultan fundamentales para su viabilidad económica. “El que las ayudas se demoren, pese a estar aprobadas, dificultan el normal funcionamiento de los centros”, manifiesta. 

Retorno Asimismo, Matías García pone de manifiesto el retorno de estas ayudas públicas a la sociedad. Y es que distintos estudios, entre ellos uno realizado por la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), señalan que por cada euro subvencionado por la administración retorna al erario público 1,53, una cifra que, expone García, “es mucho más alta en Almería, donde por cada euro revierte 2,53 euros”.

70% de los contratos Los Centros Especiales de Empleo (CEE)nacen en 1985 como fórmula de empleo para personas con discapacidad. Son empresas promovidas principalmente por asociaciones de personas con discapacidad y/o sus familiares, sin perjuicio de que cualquier persona física o jurídica pueda constituir uno. 

El objetivo principal de estos centros es la integración laboral y social de personas con discapacidad. Para obtener la calificación de Centro Especial de Empleo, las empresas deben contar en su plantilla con un mínimo del 70% de trabajadores con discapacidad y solicitar la correspondiente calificación a la administración competente. Estos centros desarrollan muy diversas actividades y, si bien nacieron a principios de los años 80 ligados a la contratación industrial, han ido abriéndose año tras año a nuevos mercados que les han llevado a la prestación de servicios de todo tipo. 

De hecho, en algunos sectores, como lavandería industrial, son líderes absolutos del sector. Entre las actividades más desarrolladas por los Centros Especiales de Empleo destacan la limpieza, telemarketing, montajes industriales, manipulados, tratamiento de datos, textil, imprenta, jardinería y servicios de logística, entre otros