Comerciantes de la Plaza solicitan al Ayuntamiento poder abrir cada tarde

Representan a poco más de una docena de puestos de venta, de los casi 90 que hay en el Mercado Central, pero se sienten legitimados para reclamar al Ayuntamiento el permiso para abrir también por las tardes. Una demanda que ahora estaría más justificada, si cabe, desde que se abriera al público el supermercado ubicado en el Mercado Central.
Entre quienes solicitan esta ampliación de horario hay puestos de venta de pan, carnicerías, charcuterías, frutería y verdulería, y también una cafetería que no puede dar comidas a partir de las tres de la tarde. Saben que no son muchos, pero tampoco exigen que la apertura sea para todos, sino para el que quiera o lo necesite para, en ocasiones, “poder subsistir”.

Están convencidos también de que si se empieza a abrir por las tardes, se ganarán clientes. “El público que acude hoy a la Plaza no es el mismo de hace años, ni tampoco se pueden comparar unos mercados con otros”, asegura Loli Mateu Escamilla, que dice conocer a familias a las que les gusta comprar en el Mercado, pero que no lo hacen porque trabajan por las mañanas. Y es que abrir por las tardes permitiría llegar a clientes que hoy en día se quedan fuera del ámbito del Mercado Central.

Sin unanimidad

El debate de abrir o no por las tardes viene de largo, reconocen algunos comerciantes que han preferido el anonimato. Para ellos, el centro está “muerto” por las tardes y pagar la nómina de una persona que abra el puesto para no hacer nada, les resulta muy perjudicial.

Loli Mateu, que se levanta a las seis de la mañana, sabe que abrir por las tardes le va a suponer un esfuerzo. Esfuerzo que entiende que será positivo porque llegaría a más clientes.

También busca más compradores Mercedes López Colomina, que regenta un puesto de frutas y verduras y que resume su interés por abrir cada tarde en la necesidad de tener más horas para ganar ventas.

López, que es la tercera generación con puesto en la plaza de abastos, dice que, hoy por hoy, “no hay ventas. No hay horas suficientes para cubrir gastos”. Entiende que la tasa que pagan por el uso del espacio es de “mañana y tarde” y que cuando se optó por volver al Mercado Central se dejó claro que el horario sería de mañana hasta que abriera sus puertas el supermercado de la planta de abajo. Súper que ya está en marcha.

Precisamente, el horario del supermercado obliga a tener abierta al público todas las tardes la puerta de acceso al Mercado desde la calle Juan Leal, dicen los partidarios de mantener la jornada continuada.

Servir comidas

Inmaculada Rubio regenta en la Plaza un puesto de cafetería que prepara para los clientes los productos frescos que han comprado en los puestos de carne o pescado. “Pero sólo hasta las tres”, se lamenta. Ella es una de las que apuesta por la ampliación de horario y pide al Ayuntamiento no tanto que se vuelva a estudiar la propuesta, que ya se les ha dicho que en septiembre se pondrá sobre la mesa, sino que simplemente les permita abrir.

Con horario también vespertino “serían muchos los clientes que al salir del trabajo podrían acercarse a tomar algo a la Plaza y que ahora ni se les pasa por la cabeza”, dice.

Ninguno se queja del supermercado, pero sí quieren competir en igualdad de condiciones en horarios.