La Comandancia de Almería era su casa y en su casa recibe su último homenaje. El salón de actos de la Guardia Civil alberga la capilla ardiente del agente Emiliano Quintana Fernández, fallecido en una explosión en un furgoneta del TEDAX el pasado martes.
Decenas de familiares, amigos, compañeros y autoridades acudieron desde las 19 horas del viernes a la capilla para despedir a este guardia civil granadino de 50 años de edad, casado y con una hija. “Un español ejemplar”, como le describió el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa.
El trabajo a contrarreloj de los forenses del Instituto de Medicina Legal de Almería y de los servicios de Criminalística de la Benemérita en Madrid permitió cumplir con las previsiones más optimistas y acelerar los actos de homenaje. Completadas las pruebas de ADN, el Juzgado de Instrucción número Cuatro de Almería autorizó la entrega de los restos a la familia y el comienzo de los actos funerales.
El primero es el homenaje público en la capilla ardiente de la Comandancia de Almería, abierta a todos los ciudadanos hasta las 10 horas de hoy sábado. Según fuentes oficiales de la Guardia Civil, a las 11 horas se producirá la misa fúnebre en la iglesia de Santa Teresa de Jesús, a pocos metros de las propias instalaciones de la Benemérita. Finalmente el cuerpo de Emiliano Quintana será incinerado.
Los compañeros
La Subdelegación del Gobierno en Almería ha confirmado la presencia del delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, y del secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, este sábado en la despedida del especialista del grupo TEDAX-NRBQ de Almería.
Además, se espera una amplia representación de agentes de la Policía Nacional, Policías Locales y la Brigada de la Legión (Brileg), solidarizados con la muerte del guardia civil en acto de servicio. No en vano, el TEDAX de la Comandancia de Almería colabora activamente con otros cuerpos de seguridad, en un terreno donde la especialización y la formación continua son claves.
El siniestro se produjo a las 14.50 horas del martes en una cochera de la Comandancia, unos minutos antes del cambio de turno. Emiliano Quintana, muy experimentado, murió en una detonación producida presumiblemente en una furgoneta donde se custodiaba “material de dotación”, según indicó el director general Arsenio Fernández de Mesa.
En el momento de los hechos estaba solo, en una aparcamiento subterráneo bajo la cantina, donde se hallaban unas 20 personas entre comensales y trabajadores. La deflagración destrozó la puerto del garaje y provocó una intensa humareda negra, pero no dañó la estructura del edificio. Emiliano Quintana, sin embargo, murió al instante. La Guardia Civil está de luto desde entonces y llora la pérdida de un agente muy querido y respetado en el colectivo.
Las condolencias
La noticia del accidente motivó una oleada de mensajes de condolencia. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, presentaron sus respetos a la familia y a la Comandancia de Almería por la pérdida.
“En estos momentos, tan trágicos y duros, queremos estar muy cerca de la Guardia Civil, transmitir fuerza, ánimo y cariño, así como el orgullo que siente España del trabajo diario que hacen, garantizando la paz y la seguridad, reconociendo a un guardia civil que ha tenido un accidente en acto de servicios y que daba ejemplo diario a nuestro país desde el respeto y la admiración”, dijo el pasado jueves el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz.
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