Almería arroja al mar 9 millones de metros cúbicos de agua sin depurar

La Federación de Regantes de Almería (Feral) considera que ni Almería ni los pueblos del curso bajo del Andarax están haciendo los deberes en materia de depuración y reutilización de sus aguas residuales, una situación que provoca que millones de litros de agua se arrojen al mar sin tratamiento.

Los cálculos realizados por los regantes indican que se pueden estar desaproveechando entre nueve y diez hectómetros cúbicos que, tras ser utilizados en los hogares de Almería, Huércal, Pechina, Viator o Rioja, no pueden ser reutilizados en los riegos al no recibir el tratamiento adecuado.

Bajan los aportes Desde que se pusiera en marcha el sistema terciario de depuración, el que permite la reutilización de las aguas residuales tratadas en el riego de los cultivos, el volumen de agua de la que pueden disponer los agricultores no ha dejaado de bajar.
En la actualidad, de los 15 o 16 hectómetros cúbicos que se podrían estar utilizando para los regadíos sólo 7 u 8 llegan hasta las explotaciones de la Vega de Almería y los pueblos de su entorno.

Millones de litros Pero no es sólo la capital, tampoco los pueblos del Bajo Andarax disponen de depuradoras para un mínimo tratamiento de sus aguas residuales, que se vierten directamente al cauce seco del río y llegan al mar para perderse definitivamente. Es un hectómetro cúbico y medio de agua que no llega tampoco a los regantes y que, en este caso, genera además un problema importante de contaminación del Andarax, un foco de malos olores y un generador de plagas de mosquitos que hacen la vida imposible a los ciudadanos.

Sumando cantidades, a Feral le sale que Almería y su entorno están tirando al mar entre nueve y diez hectómetros cúbicos de agua, más de 9 millones de metros cúbicos, de un agua que sería de vital importancia para la agricultura de la zona y que permitiría, por ejemplo, abastecer sin estrecheces no solo a los invernaderos, sino a todas las plantaciones de cítricos que se ubican en el Bajo Andarax, afectadas por la sequía.

Urgencia Las peticiones de la Federación de Regantes se centran en la urgencia en las actuaciones públicas para concluir, sin más dilaciones, la ampliación de la planta depuradora de El Bobar, así como las conexiones de los municipios del entorno de la capital para evitar que sigan vertiendo en el cauce del río.

Además solicita que se construya un nuevo centro de tratamiento terciario para hacer útiles las aguas depuradas para los riegos agrícolas, ya que previsiblemente se producirá un incremento del volumen de agua a tratar.
Paralelamente han pedido una mayor utilización de las plantas desaladoras de Almería o de Rambla Morales para el uso urbano, ya que los agricultores no pueden asumir los costes del agua desalada.