La policía desalojó en la tarde noche de ayer a decenas de personas que se habían concentrado en el centro de Almería para pedir la liberta de los dos integrantes de la compañía teatral 'Titeres desde abajo' detenidos el viernes en Madrid en el trascurso de la representación de la obra 'La bruja y don Cristóbal', programada por el Ayuntamiento madrileño, en la que mostraron ante niños el ahorcamiento de un juez, el apuñalamiento de una monja, y un cartel con la leyenda 'Gora Alka-ETA' . Los padres asistentes avisaron a la Policía, que detuvo a ambos titiriteros, uno de ellos almeriense, acusados de un delito de enaltecimiento del terrorismo y por el que se enfrentan a una pena de varios cuatro años y medio de cárcel.
Apenas unos minutos La concentración de Almería apenas duró unos minutos. Los miembros de las fuerzas de seguridad del estado desalojaron a las decenas de personas que comenzaban a congregarse sobre las siete de la tarde en la Plaza de Las Velas, al inicio de la Rambla de Almería. Durante unos pocos minutos los manifestantes exigieron la libertad de los dos detenidos porque “el arte no es terrorismo”. La concentración pública, que no fue comunicada a la administración, tal y como exige la ley, contó con el apoyo del sindicato CNT, entre otras organizaciones.
Uno es almeriense Las reacciones a la detención de los dos jóvenes, uno de ellos natural de Almería, no han dejado de sucederse. Ayer les 'tocó el turno' a la asociación Dignidad y Justicia, al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y hasta el mismo ministro de Justicia, Jorge Fernández Díaz.
Golpes mediáticos El presidente de la Asociación Dignidad y Justicia, Daniel Portero, acusó a la Fiscalía de la Audiencia Nacional de "actuar en función de los golpes mediáticos del momento" por el diferente criterio aplicado a la hora de pedir prisión preventiva para los dos titiriteros detenidos en Madrid y no, en cambio, por ejemplo, para el exjefe del aparato político de ETA Aitor Elizaran.
Por su parte, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, manifestó ayer domingo compartir la posición "de la Fiscalía y de la Policía" ante la polémica del espectáculo de títeres contratado por el Ayuntamiento de Madrid que el viernes exhibió una pancarta de apoyo a ETA ante un grupo de niños. Un hecho que calificó como muy grave. "La apología del terrorismo y encima con menores es muy grave", señaló Albert Rivera en su cuenta persona de la red social Twitter después de que un usuario le preguntara por su posición ante la polémica.Antes, el líder de Ciudadanos había difundido un mensaje de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, donde la regidora reclamaba la libertad de los dos titiriteros encarcelados al considerar que la obra "no era delito" aunque fuera "de mal gusto". Colau manifestó que es posible que la obra satírica y carnavalesca fuera de mal gusto y que no fuera apropiada para niños, y aseveró que "como máximo" se trata de un error de programación, tras lo que destacó que el responsable ya ha sido destituido. "Una torpeza no es un delito. La sátira no es un delito. En una democracia sana, en un estado de derecho, hay que proteger toda libertad de expresión, hasta la que no nos guste, hasta la que nos moleste", concluyó.
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