Melodías accesibles pero trabajadas desde la sencillez menos ampulosa, una manera propia de contar historias interpersonales, en el punto en el que la razón alcanza la madurez de saber aprender a llevar las heridas del amor y una voz que, dosificada entre la modulación pop y los alardes líricos, se ha convertido en una de las más apreciadas del momento, son algunos de los ingredientes que no muchas veces coinciden en el mismo artista y que han convertido a Vanesa Martín en una estrella popular en los últimos años. La malagueña, además, derrochó simpatía y cercanía, anoche, en el tercero de los conciertos de la Feria de Almería en el espacio del recinto ferial, organizado por el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería.
Con cinco discos de estudio en apenas una década, la malagueña ha cimentado un repertorio que cada vez se presenta más sólido y celebrado por su amplia legión de seguidores, más de 2.500 anoche en el Recinto donde actuó como escala de la amplia gira de presentación de ‘Munay’, un nuevo jirón de emociones y vivencias por las que es fácil sentir empatía en alguna de las estrofas, de las alegrías y penas, por el mero hecho de vivir y, especialmente, sentirse vivo.
Con Alberto Miras al piano y dirección musical; Daniel González "Taketo" en el bajo; Joaquín Calderón a la guitarra, violín y coros; Jose Marín a la guitarra y coros; y Manuel Reina a la batería, Vanesa Martín arrancó precisamente con uno de los temas del último álbum, ‘Nunca me conoció’, que abriría la caja de las aventuras y desventuras del deseo y el olvido como ‘Frenar enero’, ‘La piel’ o ‘Inmunes’, antes de desplegar el primero de los tres bloques de temas enlazados, con el objetivo de que las novedades no saquen del setlist temas emblemáticos, como ‘Si me olvidas’, ‘Si pasa o no’ o ‘Trampas’.
Fue este popurrí el punto de inflexión del concierto puesto que en la emocionante ‘Arráncame’ y en ‘Polvo de mariposas’ llegarían los primeros desgarros vocales, candentes e hirientes, como bien reconoció el público con sonoras ovaciones. El nivel ya no decaería. Tras una triada de temas recientes, la dinámica ‘Que se entere Madrid’, ‘Sucederá’ y ‘Ya’, llegaría otro momento mágico de la velada, en el que Martín cantaría solo acompañada por el piano de Miras ‘No te pude retener’ y ‘Durmiendo sola’.
Cruzando el ecuador del repertorio como flecha que atraviesa el corazón en formas de canción, ‘El amor no se explica’ iniciaría una segunda parte donde el nervio eléctrico y el baile llegaría con ‘Sintiéndonos’, ‘Ropa desordenada’ y ‘Aún no te has ido’. Con más de una hora de concierto y mucho calor para artistas y público, el arrojo final vendría con ‘Te has perdido quien soy’, ‘Libres’, ‘9 Días’ y la esperada ‘Sin saber por qué’, que sirvió para realizar la primera despedida antes de los bises y con los brazos abiertos en aplauso colectivo.
Todavía quedarían ‘Después de soltarnos’, ‘Hablarán de ti y de mí’, canción que ejerce de banda sonora de ‘Las chicas del cable’, la primera serie original de Netflix producida en España, y ‘Complicidad’ que fue, precisamente, lo que más hubo una noche más entre Vanesa Martín y su público. Eso que ni se compra, ni se vende, se tiene o no se tiene.
Todavía quedan dos conciertos para esta edición de la Feria de Almería. El primero de ellos será esta misma noche, con el baile electrolatino de Juan Magán, Danny Romero y DCS. El último concierto será en la noche del sábado, día 26, con el asturiano Melendi. Las entradas para estos conciertos, que tienen un precio de 20 y 28 euros respectivamente, se encuentran disponibles en la taquilla municipal situada en el Teatro Apolo y también en Zapatería Entretacones, Heladería La India, Discos BPM y www.ticketmaster.es. También lo estarán en la propia taquilla del recinto la misma noche del concierto y sin incremento de precio.
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