Sánchez pide lealtad a Casado y este dice que ejercerá una “oposición firme“

La primera reunión en el Palacio de la Moncloa entre el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y el presidente del PP, Pablo Casado, se prolongó ayer tarde durante cerca de tres horas. Durante este largo encuentro, ambos pasaron revista a los principales asuntos de actualidad, como la inmigración, la situación en Cataluña o la política económica.

Tras este primer encuentro oficial, el presidente del Gobierno señaló a través de su cuenta de Twitter que ha pedido a Casado “una oposición responsable y leal en cuestiones de Estado” porque “el objetivo común debe ser avanzar por España”. Esos asuntos de Estado, según dijo, son la migración, la política europea, la violencia de género o infraestructuras.

Sánchez no mencionó la situación en Cataluña, un asunto en el que, según habían avanzado fuentes de Moncloa y del PSOE, el Gobierno también espera del PP una oposición tan leal y responsable como la que ejercieron los socialistas con Mariano Rajoy.

Por su parte, en una comparecencia desde la sala de prensa de Moncla, Pablo Casado quiso subrayar que liderará “una oposición firme” y defensora los intereses del país porque, según dijo, no ha visto “un proyecto para España” por parte del Gobierno.

“En la moción de censura no hubo un proyecto para España y todavía o lo he visto, ni lo hubo en la moción ni lo he oído desde el Gobierno”, afirmó.

Casado hizo hincapié en lo “inédito” de la situación actual, en la que el Gobierno solo tiene 84 escaños y el partido de oposición es mayoritario en Congreso y Senado, y recalcó que los partidos que acordaron la moción de censura ahora no pueden “hilvanar” ningún pacto para “hacer nada positivo”, ni aprobar ni ninguna medida legislativa.

“En cuestiones de Estado que sean buenas para todos podremos seguir hablando pero eso es compatible con la oposición sea firme”, expresó desde la sala desde la que se informa de los acuerdos del Consejo de Ministros y donde hoy comparecerá Sánchez. Según fuentes de Moncloa, eso ha sido una deferencia y un gesto: cederle la sala de los asuntos de Estado cuando se le ha pedido una oposición de Estado.

Después, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, emplazó al líder del PP a demostrar que está dispuesto realizar una oposición leal al Gobierno. “Puede ser el inicio de una nueva etapa, pero en la que estaremos atentos si Casado vuelve a caer en la tentación de hacer demagogia partidista en temas de Estado", avisó. Y en este sentido le reprochó sus declaraciones de la última semana sobre la llegada de migrantes a España.