Los planes del británico Corte para abrir en Almería son ahora más enigmático que nunca: resulta que en la última Junta de Accionistas, donde se dirimen los propósitos de expansión de la cadena, no se planificó ninguna apertura para los próximos dos años.
Por tanto, Almería capital junto a Toledo -siamesa de la ciudad de la Alcazaba en esta vigilia de más de 20 años por los grandes almacenes- Lugo, Orense, Zamora, Palencia, Soria, Segovia, Avila, Ciudad Real, Cáceres, Cuenca, Huesca, Teruel, Logroño, Lérida y Gerona seguirán sin lucir el triángulo verde.
Es más, confirmado por los hechos, la nueva política comercial de la cadena presidida por Dimas Gimeno es la de desinvertir, como ha quedado patente con la venta de varios edificios y activos, el último hace unos días en Barcelona.
De hecho, uno de los últimos en abrir, fue el de El Ejido, y se remonta a 2010. La crisis de consumo ha lastrado este negocio que empezó con la vieja sastrería del indiano Ramón Areces en el corazón del viejo Madrid. Una deuda financiera de 5.600 millones ha puesto plomo en las alas del departamento de expansión y ha virado las inversiones a financiar el plan de prejubilaciones para empleados cincuentones, justo cuando la compañía sopla un cumple años con 75 velitas.
75 años
El actual presidente, sobrino del patrón Isidoro Alvarez, tiene que lidiar además con las turbulencias que provocan los demás accionistas de una empresa que, a pesar de todo, sigue siendo familiar: un fondo catarí tiene el 12% del capital social, más las participaciones de la familia Guil y Areces. En ese alambre, con los entrañables anuncios por su aniversario, ‘Tu historia es nuestra historia’ con música de Elton John, se encuentran los vinculos actuales del líder de la distribución comercial con la capital almeriense, tras seis años de actividad, con altibajos de ventas, en la comarca del Poniente.
Pero, toda esa falta de interés por sentar reales en Almería por los problemas detallados, contrasta con el hecho de que la empresa no haya pedido en todo este tiempo la devolución del millón y medio de euros que adelantó a la firma del convenio a tres bandas con el Ayuntamiento y Los Hermanos de La Salle, rubricado en diciembre de 2005.
El Corte Inglés podría haber denunciado el convenio legalmente, transcurridos cinco años sin que el Consistorio le posibilitase la necesaria licencia para iniciar las obras. Pero no lo ha hecho, algo que puede ser entendido como la prueba del algodón de que Dimas Gimeno no tira la toalla en Almería, que ratifican fuentes de la compañía.
Lo positivo, hasta ahora, es que el Ayuntamiento que preside Ramón Fernández-Pacheco, se ha ahorrado ese dineral. Lo negativo para los consumidores y para la Plataforma ciudadana Pro Corte Inglés, con 15.000 firmas, es que tampoco hay certidumbre a medio plazo sobre una posible implantación.
Los roces de tramitación entre Junta y Ayuntamiento derivados de la permuta de equipamiento educativo, la protección de la fachada y la inclusión en el PGOU frenaron el proyecto en pleno auge económico, antes de que llegaran los bocados de la recesión.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/20/economia/102160/el-corte-ingles-no-pide-el-millon-y-medio-que-adelanto-en-la-salle-hace-ya-11-anos