Ha sido subir las temperaturas en el continente europeo y la demanda de sandía y de melón, dos frutas refrescantes y típicas del verano, se ha disparado. Ha sido cuestión de apenas una semana, desde que el 22 de mayor los termómetros empezaran a marcar temperaturas más elevadas.
El estirón de la demanda llega después de un inicio de campaña que para la práctica totalidad de las empresas estaba resultando bastante pobre, con una demanda baja y, consecuentemente, unos precios anormalmente bajos, en el entorno de los 30 o 40 céntimos por kilo de sandía ya confeccionada.
Bendito calor
La abrupta llegada del calor, con temperaturas más propias del mes de julio que de mayo, ha obrado no obstante el milagro de elevar de una forma más que significativa los precios, un alivio para la actual campaña, posiblemente su tabla de salvación.
Ya lo aventuraba la pasada semana el diario digital especializado Hortoinfo cuando hablaba de que, tras el aumento de la demanda, no había sandía y melón suficiente en la provincia para atender los pedidos que empezaron a llegar desde todos los mercados de destino.
Más grados, más euros
El ‘efecto calor’ lo explica, por ejemplo, Enrique de Los Ríos, gerente de Única Group, que afirma que la tendencia en los precios de la sandía es “termómetro puro”, un comportamiento perfectamente predecible en base a la experiencia de muchos años en los mercados.
A las empresas del sector les salen las cuentas climatológicas que indican que cuando en Europe se superan los 20 grados la demanda de sandía y melón aumenta. En el caso de España ese paso hacia el gran consumo de estos frutos está en los 30 grados.
Altos precios
El tirón de la demanda de esta última semana ha tenido un efecto determinante en los precios de melones y sandías. Si hace diez días el kilo de sandía se pagaba en torno a los 40 céntimos en origen, estos últimos días el aumento de los precios ha llegado a superar el 50 por ciento. En el caso del melón el comportamiento está siendo muy similar, pasando de los apenas 50 céntimos a pagarse por encima del euro por kilo de producto confeccionado y listo para salir a los mercados.
El buen momento en precio y en volumen de producto se prolongará aún durante varias semanas, aunque no demasiado porque en breve otras zonas productoras del sur y del levante español comenzarán a comercializar su cosecha de sandía y melón.
Todo o nada
Las empresas del sector hortofrutícola almeriense coinciden en señalar que hace poco más de una semana los almacenes se encontraban repletos de sandías sin un destino definido. Millones de kilos de producto sin clientes que se los llevaran.
La llegada del calor al continente europeo en general, y a España de una forma más acentuada, ha sido la espoleta perfecta para dar salida a la gran cantidad de producto que sale actualmente de los cultivos almerienses.
Una demanda que llega desde los clientes, pero también desde empresas comercializadoras de otras zonas del país en las que aún no se ha iniciado la campaña, casos de las de Sevilla, Murcia o Castilla La Mancha. A estas también les ha llegado la demanda, pero tienen que recurrir a las producciones almerienses, más tempranas que las suyas, para atender la demanda.
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