Llegan tubos y bombas para llevar agua al Bajo Andarax

La Comunidad General de Usuarios de Aguas de Almería (CGUAL) se citó ayer en la planta desaladora de la capital con los responsables técnicos del Ayuntamiento y de la empresa concesionaria para definir las conexiones para llevar el agua desalada a los cultivos de la zona del Bajo Andarax ‘cuanto antes’, señalaban ambas partes.

Mientras tanto llegaba a la zona el primer camión cargado con los tubos que han de conducir ese agua y se encargaban las bombas de impulsión para llevarla hasta las fincas de los regantes. Ya sólo queda pendiente la concesión de las licencias para empezar los trabajos en el terreno.

Dos tuberías
Pero mientras todo ello se concreta se mantiene abierto el pleito que mantienen la CGUAL, con su presidente José Antonio Pérez a la cabeza, y Coexphal, que desde hace una semana trabaja en la instalación de una tubería, una segunda red, para trasladar el agua de la desaladora a la red de riegos del Bajo Andarax.

El último episodio ha sido el intercambio de misivas entre ambas instituciones. La gerencia de Coexphal hacía llegar a la CGUAL un burofax en el que se le informaba de la decisión de promover una conducción de agua desde la desaladora a las instalaciones de la propia CGUAL.

En esa comunicación se le informaba de que la citada obra “no tiene más objeto que el de conseguir que los socios de nuestras empresas y cooperativas, que constituyen la mayor parte de sus regantes, tengan acceso lo antes posible al agua desalada” y le invita a que realice las propuestas que considere oportunas sobre las condiciones de uso de esas conducciones para cumplir con el fin previsto de ceder el uso de esa instalación por parte de la comunidad.

La respuesta
La respuesta del presidente de CGUAL y Cuatro Vegas llegaba ayer para desmentir que empleados de Cuatro Vegas cortaran el paso a la excavadora que estaba realizando las obras encargadas por Coexphal, para los que piden que se disculpe Coexphal. Añade que esa confusión “es sólo un botón de muestra de las muchas que rodean a su insólita promoción de una tubería no solicitada por la legítima representación de los regantes”.

Por lo demás pide que les remitan el proyecto “para que nuestros técnicos evalúen la viabilidad” de una obra “que estará muy avanzada”.