lmería despide 2015 como un año poético, cargado de futuro. Ahora sí, en esta calenda que está a punto de fenecer, se han dejado ver indicios, señales, matices del color de la recuperación económica, que tanto se han barruntado pero sin llegar a visualizarse en sí.
Ahora sí aparecen en tablas estadísticas aquellos reiterativos brotes verdes tras la tierra quemada de la crisis que todo el mundo creía ver, sin verlo, como la leyenda urbana de la chica de la curva.
Ahora sí hay ingredientes, en este año que finaliza, para exponer un argumentario de mejoría: en primer lugar, Almería, hasta diciembre, ha crecido en 8.875 nuevos afiliados a la Seguridad, alcanzado una cifra global de 265.907, similar a la que se registraba en el año de precrisis de 2008.
Ha jugado una importancia esencial en este crecimiento de afiliación el segmento de autónomos, que con 55.593 está casi en máximos históricos, con un dato sorprendente por novedoso: la mujer almeriense copa ya casi la mitad de esa cifra de trabajadores por cuenta propia.
Pago único
Desde la oficina de Empleo de la Subdelegación del Gobierno explican que una de las razones de este crecimiento ha sido que muchos trabajadores que han perdido su empleo en los últimos años han aprovechado la modalidad de ‘Pago único’ del cobro del desempleo para abrir algún negocio. De la cifra global de afiliados en la provincia, al Régimen General pertenecen 209.371; Autónomos, 55.593; al Régimen del Mar, 942.
En el Régimen general, computan desde hace seis años los trabajadores del sistema agrario, que son 55.649 y los del sistema de empleadas de hogar, que son 2.973 en la provincia, dada de alta, aunque hay se intuye un alto porcentaje de economía sumergida.
También ha propiciado que crezca el número de autónomos en la provincia la desaparición del Régimen Especial Agrario, que ha propiciado que muchos titulares de explotaciones o arrendatarios de invernaderos se conviertan en autónomos agrarios con cotización por el sistema de módulos. Otra de las singularidades del mercado laboral almeriense es el alto número de trabajadores extranjeros que alcanza la cifra de 56.271, la mayoría del sistema especial agrario del Régimen General (35.636). Son también mayoría los procedentes de países no comunitarios (38.447), frente a los 15.713 de países de la Unión Europea.
También ha aumentado en 2015 el número de empresas, con al menos un asalariado, con 29.813 constituidas hasta noviembre, aunque lejos de las más de 32.000 existentes en 2008.
Almería, como otras provincia, se encuentra en un momento económico crucial, en una encrucijada ante el almanaque de 2016 ya dispuesto sobre el escritorios, con el reto de que las cifras macroeconómicas y la caída del precio del petróleo se traslada a las economías domésticas. No obstante, nada puede hacer ignorar que la tasa de paro EPA aún se mantiene en un sonrojante porcentaje del 29%, aunque un 6,7% menos que hace un año.
La provincia ha (casi) consolidado un cambio de tendencia, un viraje de rumbo, desde que en 2009 comenzara a malograr puestos de trabajo. Ninguna otra provincia andaluza, con los datos en la mano, ha creado tanto empleo como Almería, en los últimos doce meses, en términos porcentuales y teniendo en cuenta la caída de la población activa por la marcha de emigrantes y de jóvenes al extranjero.
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