El agua de Benínar, una reivindicación histórica para nuestros regantes

Por Manuel Cortés

Alcalde de Adra

Garantizar la suficiencia de recursos hídricos para nuestra agricultura es una preocupación compartida en la provincia de Almería, porque somos plenamente conscientes de que el agua es el sustento de un sector que se ha erigido, gracias a la capacidad de adaptarse y modernizarse de nuestros agricultores y agricultoras, en la locomotora del progreso y el desarrollo de nuestra tierra. Un sector que genera empleo y riqueza.

Los años de sequía, junto a la escasez de los recursos con que cuentan algunos de nuestros principales acuíferos y las características de algunas de nuestras aguas, son los principales problemáticas a las que se enfrenta la agricultura del Poniente Almeriense y que, tras dejar nuestra provincia sin trasvase, debemos abordar de forma estratégica y concienzuda para que el pilar económico de nuestra provincia no sea, de nuevo maltratado. 

Defender el acceso al agua debe ser una prioridad, al igual que hacer compatible la obtención de estos recursos con la sostenibilidad, a corto, medio y largo plazo, de nuestro medio ambiente. A nadie se le escapa que para hacerlo posible debemos concienciar e impulsar, de forma paralela, las medidas y políticas necesarias para fomentar un uso eficiente. 

Los regantes abderitanos han reivindicado históricamente su derecho de acceder a unos recursos hídricos justos, a la par que absolutamente necesarios, para asegurar la continuidad de las producciones en nuestro municipio. Me refiero al agua procedente del Pantano de Benínar, una demanda en la que hemos trabajado, codo con codo, Ayuntamiento y comunidades de regantes dentro de la Junta Central de Usuarios.

Como alcalde he sido plenamente consciente de que luchar por esa agua es fundamental para salvaguardar los intereses de nuestros agricultores y, a través de la Junta hemos trabajado con ahínco para desbloquear una situación tremendamente injusta.

Ahora tenemos razones para confiar en que, después de infinidad de reuniones, gestiones y encuentros con distintas administraciones podremos contar con esos tres hectómetros procedentes del pantano que den tranquilidad a los regantes de nuestro municipio. De hecho, ya se han abierto las plicas para la adjudicación del agua del pantano, un trámite crucial en el procedimiento en el que los miembros de la Junta Central de Usuarios quisimos estar presentes. Ahora, estamos expectantes. Siguiendo de cerca cada detalle de los trámites con los que confiamos resolver un problema histórico, una demanda social de nuestra ciudad que vemos un poco más cerca.