El director Manuel Martín Cuenca habla de cine con alumnos de Las Norias

Manuel Martín Cuenca, el prestigioso realizador ejidense, director de películas como “Caníbal”, “La mitad de Óscar”, “Malas temporadas” o “La flaqueza del bolchevique”, su ópera prima y con la que saltó a la fama, ha mantenido un encuentro con alumnos del IES Francisco Montoya, de Las Norias, en el que ha animado a los jóvenes a no dejarse vencer por el desánimo y luchar por lo que desean hacer.

“Martín Cuenca encarna la esperanza de que los sueños de estos chicos pueden hacerse realidad.Que él, que es de aquí, haya logrado ser un director tan reconocido, hace que cualquier joven ejidense vea más real luchar y alcanzar sus metas”, ha explicado en Cadena SER Poniente el crítico de cine Carlos Aguilera, que presentó el acto en el que intervino el realizador, que llegó a Las Norias recién aterrizado de Miami. 

La charla con Martín Cuenca no es la primera actividad que este instituto realiza vinculada con el mundo del cine. Primero fue un festival de cortos y, más adelante, un taller de cine que impartió Aguilera, que habla del centro como una suerte de “macedonia cultural” en el que conviven jóvenes de distintas religiones, culturas y color de piel y que se ha convertido en la comarca en todo un ejemplo de integración social. 

En contra de lo que pudiera parecer teniendo en cuenta su trayectoria, Martín Cuenca no habló a los jóvenes de  su éxito, sino de todo lo contrario, del fracaso. “El fracaso es la mejor escuela de la vida. No hay que tener miedo a hacer mal las cosas. Nada se hace sin dolor, mucho esfuerzo y dudas. Las cosas cuestan y hay que estar dispuesto siempre a luchar. Por eso, si existe el cielo, debería ser como una Universidad”, les dijo el director a los chavales. 

El encuentro con el director ejidense ha estado organizado por Fapace (Federación de Asociaciones de Familias del alumnado de centros de Educación Pública), en colaboración con el instituto, que dirige el profesor Pedro Lozano, y la Mesa de Educación y Comunidad de Las Norias. Al finalizar el acto, Manuel Martín Cuenca ha señalado lo “gratificante” que había sido para él charlar con unos jóvenes “llenos de inquietud y curiosidad. Me sentí un alumno más entre ellos”.