El Ayuntamiento de Adra aprobará en breve rebajas fiscales a los residentes en esta localidad con el fin de promover la adopción de perros abandonados. Así lo ha apuntado en Cadena SER Poniente el concejal de Seguridad del municipio, César Arróniz, que no ha desvelado, sin embargo, qué medidas se pondrán en marcha porque, asegura, el asunto todavía está en fase de estudio. “Estamos viendo la alternativa de facilitar incentivos para quienes adopten porque sabemos que hay muchísimos animales abandonados y para que los compren, mejor que los adopten”, ha señalado.
Con esta decisión, el consistorio da un paso más en la protección de los animales y convierte a Adra en la localidad con la normativa más avanzada de la provincia -y a la vanguardia también en Andalucía- en esta materia.
Razas peligrosas
Esta misma semana, el ayuntamiento anunció, por ejemplo, la agilización de todos los trámites para el registro de perros de razas consideradas potencialmente peligrosas. “Lo que pretendemos es animar a los dueños de perros de estas razas a que regularicen la situación de sus mascotas. Antes, evidentemente, eran varios trámites y varios edificios por los que había que pasar y desde que hemos creado la Sección de Animales de Compañía en el Ayuntamiento, todo está centralizado en un mismo edificio y es mucho más ágil y más rápido. Se está notando porque los propietarios de perros de estas razas se están animando a regularizarlos”, ha apuntado Arróniz en Cadena Ser Poniente. En Adra hay censados actualmente en torno a 4.000 perros y 500 de ellos pertenecen a razas como pitt bull terrier, staffordshire bull terrier, American staffordshire terrier, rottweiler, dogo argentino, fila brasileiro, tosa inu, akita inu y doberman.
Esta medida -junto a otras como la creación del primer registro de ADN canino de la provincia- está contemplada en la ordenanza sobre tenencia y protección de animales que el Ayuntamiento aprobó el pasado mes de noviembre. Ahí se incluyó también la dotación de un tramo de costa que se ha convertido ya en la primera playa en la provincia de uso exclusivo para perros y en una de las tres que en Andalucía cuentan con este distintivo. Es la conocida como playa de ‘La Rana’, de unos 400 metros de longitud, abierta todo el año para los canes y sus dueños.
ADN canino
Con todo, la medida que más ha llamado la atención de cuántas se han puesto en marcha es el registro de ADN para animales, una decisión que se tomó no solo para identificar a los dueños infractores que dejan los excrementos de sus mascotas en la vía pública, sino también para resolver, aunque solo sea en parte, el problema del abandono de animales. Según argumenta César Arróniz, el registro está sirviendo para, una vez identificada la muestra, saber quién es el dueño del animal que ha sido dejado en la calle. También servirá, explica, para evitar el contagio de enfermedades. “No es solo una medida coercitiva, tiene muchos fines benéficos”, afirma el concejal de Seguridad. La ordenanza fue aprobada por unanimidad y cuenta con un amplio consenso entre protectoras de animales y veterinarios de la ciudad.
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