Los profesores se plantan y exigen denunciar todas las agresiones

Piden a Educación que refuerce la seguridad de los docentes para que no tengan miedo a denunciar

Concentración de docentes y alumnos tras las últimas agresiones a docentes en El Ejido
Concentración de docentes y alumnos tras las últimas agresiones a docentes en El Ejido
Rosa Ortiz
21:56 • 23 dic. 2016

Las dos últimas agresiones a docentes  en Almería, ambas sucedidas en centros educativos en el Poniente -una en el IES Mar Azul de Balerma y otra en el colegio SolyMar de Matagorda-, ha llevado a los profesores a plantarse para exigir que hechos de este tipo no vuelvan a repetirse.
En el instituto de Balerma, un alumno de más de 14 años agredió a puñetazos a una profesora que le conminó a dejar de usar el móvil en clase y en Matagorda el padre de un alumno agredió verbalmente, zarandeó e intentó golpear en repetidas ocasiones al profesor de apoyo de su hijo. En el primero de los casos, la docente sí cursó denuncia ante la Guardia Civil, pero el profesor de Matagorda decidió no hacerlo a pesar de contar con un parte de lesiones.




Denunciar siempre
Sin querer cuestionar la decisión tomada por este profesor - “cada casuística es diferente”, señaló en SER Poniente Juan Valdivieso, de Comisiones Obreras- desde la Junta de Personal Docente no universitaria se animó ayer a todos los profesionales de la educación en Almería a denunciar en los juzgados “cualquier tipo” de agresión física o verbal que sufran en las aulas.
“Creemos que no se trata de dar publicidad pero sí de denunciar los hechos, que las personas que tengan que intervenir lo hagan. Al igual que los casos de violencia de género, estos son actos punibles, son delictivos y hay que mostrar toda la dureza que sea posible”, señaló el portavoz sindical. Valdivieso también exigió que se pongan en marcha, de inmediato, “mecanismos” que sirvan para proteger la seguridad e integridad de los docentes.
“Cuando alguien es agredido o violentado, siente miedo a desarrollar su labor docente porque, aunque se denuncie y se castigue a la persona que haya cometido esas infracciones, después pueden volver a verse las caras y sigue habiendo un vínculo social entre el profesor de un centro y el entorno que le rodea. Debe haber instrumentos al alcance de todos los profesionales, hay que vencer el miedo a denunciar los hechos. Hay que dar ese paso al frente aunque cueste trabajo”, aseveró el responsable de la Junta de Personal Docente.










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