Un juzgado investiga un posible caso de acoso escolar en el San Antonio de Padua

El Juzgado de Instrucción número 1 de Vera está investigando un posible caso de acoso escolar, sufrido por una niña de 11 años del colegio San Antonio de Padua de Carboneras.

La investigación parte de una denuncia presentada el 9 de marzo a la Guardia Civil de Carboneras por la madre de la menor, tras una supuesta agresión verbal de la directora del centro y la tutora de la niña, el día anterior en clase.

Denuncia
“La hija le pidió a la profesora que la cambiase de grupo en un proyecto escolar, ya que con esas compañeras tenía un problema anterior”, puede leerse en la denuncia a la que ha tenido acceso LA VOZ. La tutora le respondió, siempre según la declaración de la madre, “¿qué problema? No hay ningún problema, te hemos cambiado ya mil veces”.

Posteriormente, la directora del centro le habría dicho a la escolar que buscase en el diccionario la palabra “acosador” y que “no volviese a utilizar esa palabra con sus compañeros, porque en el colegio no hay acosadores, te lo estás inventado todo”.

Asimismo, en su declaración, la madre de la menor expuso que la directora del centro le dijo a su hija  que “debía tener algún problema en la cabeza”. Tras esto, “la niña quedó anulada y muy deprimida y ha tenido que acudir al pediatra que la ha derivado al psicólogo”, explica su progenitora.

El juzgado veratense está investigando el caso y ya han declarado tanto la menor, el pasado 31 de marzo, como la directora y la tutora, a principios de abril.

Desde el día siguiente al os hechos, el 9 de marzo, tanto la menor de 11 años como su hermana de 8, no acuden al colegio y reciben clases en su propio domicilio, durante cinco horas al día. Al respecto, Educación ha iniciado el protocolo de absentismo para estudiar el caso.

Antecedentes
La madre de la menor habla de un acoso continuado, desde que su hija estaba en infantil. “No es algo puntual, sino que en este centro ocurren casos que calificaría como malos tratos”, señala.

Según su testimonio, varias compañeras de clase la acosan desde hace tiempo. “Mi hija no se daba cuenta, porque es muy ingenua, pero observamos que se reían de ella, la señalaban con el dedo o la sometían a una vigilancia durante todo el día”, denuncia la madre.

El curso pasado ya intervino el orientador del centro, ante las denuncias de la madre. No obstante, desde el propio centro hablan de que no existe un caso de violencia escolar. Esta misma conclusión es la que se extrae del escrito dirigido por la delegada de Educación, Francisca Lourdes Ortega, a la madre. En él, expone que “es un hecho objetivo que el centro ha puesto en marcha el protocolo de aplicación sobre supuesto caso de acoso escolar, no apreciándose evidencias claras de existencia del mismo”.

La madre también ha denunciado la caída por las escaleras del centro de su otra hija, de 8 años, “debido a la falta de vigilancia del profesorado”, habiendo resultado “pisada por alumnos mayores”. Desde el colegio apuntan que la caída fue fortuita y que una de sus compañeras la ayudó.

Solicita plaza en el Simón Fuentes
La madre de las dos menores solicita el cambio urgente de centro. “Queremos ir al colegio, pero a otro, donde mis hijas estén seguras”, ha afirmado a LA VOZ. Su abogado se encuentra trabajando para obtener medidas cautelares, según informa. “Han abierto un protocolo de absentismo, por lo que he ido a ver a la asistente social para explicarle la situación”, cuenta. Asimismo, añade que “no busco venganza, sino que se acabe esta pesadilla”. Igualmente, ha pedido plaza en el CEIP Simón Fuentes para el próximo curso. 

Desde la Delegación de Educación, aún no han remitido a LA VOZ información sobre el estado actual del caso. No obstante, en un escrito enviado a la madre, se habla de una reunión celebrada por el inspector el día 14 de marzo en el centro y al que la madre de la niña no habría acudido.