La batalla por el Griego llega hasta el TSJA

Uno de los padres de los siete alumnos del Instituto Abdera afectados por la eliminación de la asignatura de Griego ha dado un paso más en su particular cruzada y ayer presentó un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía contra la desestimación de la consejería de Educación a la solicitud de impartir de manera cautelar, mientras se resuelve el fondo del asunto, la materia de Griego de primero de bachillerato en el citado centro.
Cabe recordar que a principio de curso la dirección del Instituto Abdera decidía eliminar la asignatura de Griego, a pesar de que había siete estudiantes que se habían matriculado. Un hecho que no gustó a padres y alumnos ya que tal y como aseguran el centro cuenta con los recursos suficientes para impartir estas clases. 

Reclamación Fernando Basanta, es el padre del alumno que ha tomado la decisión de llevar este asunto por vía judicial, asegura que “hemos agotado hasta el último día de plazo para tratar de encontrar una solución extrajudicial a través del consenso dentro de la vía administrativa pero lo único que hemos obtenido por respuesta es la negativa”. 
“No se puede creer que una demanda que todavía tiene una solución de dos minutos tenga que terminar dirimiéndose en la administración de justicia”, afirma.
Basanta insiste en que “si mañana el centro decidiese impartir las clases de Griego a estos siete alumnos yo me iría al TSJA y quitaría el recurso y aquí paz y después gloria”.
Con el fin de intentar buscar una solución, el pasado 29 de diciembre, responsables de la Dirección General de Ordenación Educativa se reunieron en las instalaciones del Instituto con los padres de los alumnos afectados. Fernando Basanta asegura que no tuvieron oportunidad de poner sobre la mesa las contradicciones entre las diferentes respuestas denegatorias de la Delegación Territorial de Almería.
No obstante, los padres propusieron una solución sencilla, inmediata y satisfactoria que se reduce a mover una tutoría de segundo de ESO para que la profesora de Cultura Clásica pueda impartir la materia suprimida. 

Normativa Este padre afirma que la normativa autonómica garantiza la impartición de las materias troncales de opción si la solicitan quince alumnos o más, permite también impartirla a un número inferior si ello no comporta el aumento de la plantilla del profesorado. En el caso de este Instituto, la profesora de Cultura Clásica solo tiene trece horas de su especialidad en su horario, de modo que, hasta veintiuna semanales que la norma prevé como tope máximo, tiene la posibilidad de impartir las clases de griego.
En la actualidad, los siete alumnos afectados reciben clases forzosas de Literatura Universal, una asignatura en la que no se han matriculado este curso.