“Almeria es mucho más que playa”: los viajeros se deshacen en elogios

Que la provincia de Almería es "mucho más que playa" no se le escapa a ningún almeriense, sea de la costa o del interior de la provincia, pues la belleza que atesoran algunos rincones tierra adentro los convierte en auténticos paraísos a la altura de los paisajes más reconocidos, como es el caso de Cabo de Gata.

Un hecho que, cada vez con mayor asiduidad, recogen los medios de comunicación del sector viajes y turismo tanto nacionales como internacionales y que ahora vuelve a la palestra de la mano de Paco Nadal el eterno Viajero de El País que ha aprovechado su propio blog para declarar su amor por la provincia de Almería, "una caja de sorpresas", como la define.

"Hay muchos sitios que visitar en Almería más allá de la costa. El interior es muy montañoso, con sierras donde nieva todos los inviernos. Hay desiertos cinematográficos, como el de Tabernas; cuevas soprendentes, como la geoda de Pulpí; pueblos blancos de pasado andalusí y fortalezas imponentes como el castillo de Vélez Blanco", recoge el portal 1000sitiosquever.com, que lanza una pregunta antes de comenzar su Ruta en coche por el interior de Almería: ¿Necesitas más excusas para explorar los lugares y pueblos con encanto de Almería?.

La Geoda de Pulpí

De este modo, el recorrido arranca en un lugar único y que día tras día suma adeptos, enamorados y personalidades de reconocida fama que caen rendidas ante su belleza. Sí, es la Geoda de Pulpí y supone la primera parada de Nadal en este particular viaje. "A veces viajamos al fin del mundo en busca de maravillas y sin embargo las tenemos al lado de nuestra casa", relata el blog, que señala: "Con nueve metros de largo por dos de ancho está considera la segunda geoda más grande del mundo y la primera accesible por el público. La visita turística incluye un recorrido por las galerías de la mina, de la que se extrajo hierro y plata hasta finales de los 60. Termina en el nivel 3, tras bajar 15 metros en vertical por una escalera de caracol, que es donde apareció la geoda". 

Cuevas del Almanzora

El camino por el interior de la provincia prosigue por un municipio que, como bien explica Nada, recibe su nombre "por la enorme cantidad de casas cueva excavadas en los cerros de arcilla". De este modo, resalta: "En la plaza del Castillo encontrarás muchos bares con terrazas donde tomar un aperitivo al agradable sol almeriense. Luego busca por detrás de la fortaleza los lavaderos públicos y a continuación la Cueva Museo".

Cuevas de Sorbas

En esta ocasión, el vehículo de Nadal se desvía en la A-7 para entrar en el municipio de Sorbas. "Estamos en pleno Paraje Natural Karst en Yesos de Sorbas, un paisaje extraño y desolado. Hay más de 600 cuevas inventariadas, pero la acondicionada para las visitas es la del Barranco del Infierno. Aviso: no se trata de una cueva turística al uso, con caminos pavimentados, luces de colores, musiquita de fondo y pasamanos ante cualquier dificultad. La cueva se visita a lo espeleólogo: con un casco, luz frontal y trepando y reptando donde se tercie".

El Desierto de Tabernas

En esta ocasión, la autovía A-92 en dirección Guadix-Granada es el camino que lleva al viajero hasta este paisaje "sorprendente". Y dice: "Y no es una metáfora. Árido como pocos lugares del continente, sin más hálito de vida que los espartales que cubren sus torturados relieves, el desierto almeriense de Tabernas resulta tan impactante que desde hace décadas la industria cinematográfica del spaguetti-western ha usado estos decorados naturales para transportarnos, sin mudar una piedra de sitio, a los tórridos desiertos de Sonora o Arizona".

Observatorio de Calar Alto

"Desde el desierto de Tabernas sigue por la A 92 hasta la salida 362 y toma dirección Gérgal primero y enseguida hacia Olula de Castro. Si sigues esa carretera, la A-1178, llegarás hasta la cima de la sierra de los Filabres, a 2.168 metros de altitud, donde en 1975 se instaló el Observatorio de Calar Alto, el centro astronómico más grande en suelo continental europeo". El relato del viaje de Nadal por tierras almeriense le lleva también hasta este lugar que, como dice, es frecuente verlo nevado durante el invierno.

Serón y Macael

La siguiente parada del viajero es este pequeño y bello municipio del interior. "Si desde el Calar Alto bajas la sierra de los Filabres por la vertiente norte llegarás a este pueblo serrano apiñado en torno a un castillo de época nazarí. Serón conserva un casco histórico típico de planimetría andalusí. Aunque las viviendas y fachadas no están todas lo bien mantenidas que deberían, un paseo por sus estrechísimas y empinadísimas callejuelas permite dejar volar la imaginación y recrear cómo serían la vida en Al-Andalus hace casi mil años". relata Nadal.

Por su parte, sobre Macael dice: "Aunque el casco urbano tiene poco que ver, merece la pena acercarse a esta localidad del valle del Almanzora porque es el centro de producción del famoso mármol blanco de Macael, que se extrae de unas canteras cercanas de la sierra de los Filabres".

Centro Pérez Siquier y museo Casa Ibañez

Fotogragía y arte se dan cita también en el interior de la provincia. Así, Olula del Río se presenta como una apuesta por la cultura para un viaje por el interior de Almería. La figura del fotógrafo y uno de los "mejores museos de arte contemporáneo de Andalucía" se dan cita en este municipio.

Vélez Rubio y el Castillo de Vélez Blanco

Y para concluir esta particular ruta. la comarca de Los Vélez también supone un gran atractivo para los turistas y Paco Nadal no podía ser menos. " Te recomiendo empezar el paseo por la Corredera del Carmen, la calle peatonal y comercial más concurrida de la villa y la que engarza el casco antiguo", dice sobre Vélez Rubio. Sobre el famoso y bello castillo del municipio vecino, señala: "El final de esta ruta no puede ser más épico. Ya a lo lejos, desde la carretera que sube de Vélez Rubio, se aprecia ya la poderosa silueta del castillo-palacio de los Vélez, la residencia principal de los señores del marquesado, una imponente fortaleza fotogénica por sus cuatro costados. Llaman la atención sus siete torres, de la misma altura que la muralla, excepto la enorme torre del Homenaje, que sobresale por encima del conjunto".