Condecorado por el rescate heroico de una patera

La asistencia a los inmigrantes que se juegan la vida en una viaje sin retorno desde las costas africanas hasta Almería en una patera se ha convertido en una responsabilidad global. Ya no sólo participan miembros de los equipos de Salvamento Marítimo y de la Guardia Civil, sino que no se entiende la asistencia sin los voluntarios de Cruz Roja o equipos médicos de Torrecárdenas.

A esta senda de responsabilidad solidaria se unen a menudo miembros de las Fuerzas Armadas. La Armada Española acaba de condecorar al sargento primero Carlos Javier Trujillo García en la Estación Naval de Puntales (Cádiz) por su trabajo en una arriesgada operación de salvamento de una patera en las cercanías de la Isla de Alborán hace un año.

El sargento Trujillo coordinó el rescate el 12 de diciembre de 2010. El temporal empujó a la embarcación hasta una zona de acantilados en la isla, perteneciente administrativamente a Almería. A bordo viajaban 33 inmigrantes de origen subsahariano cuyas vidas peligraban por la cercanía de las rocas. “La pericia y decisión del sargento”, dice la Armada, “hicieron posible el arriesgado rescate”. “En primer lugar rescató a cinco niños, entre los cuales se encontraba un recién nacido, después a nueve mujeres y finalmente a diecinueve varones; entre las mujeres se encontraba la madre que había alumbrado al bebé en la patera y que apenas podía moverse”. Por su valentía y capacidad se le concede la Cruz del Mérito Naval con distintivo amarillo al sargento Trujillo.