Cuevas del Almanzora

Villaricos brinda este sábado un concierto único en medio del mar

Guillermo Fernández actúa en la ‘pata del muelle’ con las olas y el público como testigos

La ‘pata del muelle’, al fondo, será el escenario en una noche mágica.
La ‘pata del muelle’, al fondo, será el escenario en una noche mágica. La Voz
La Voz
21:51 • 13 ago. 2021

Villaricos acogerá mañana sábado un concierto único y novedoso, que envolverá al público entre la magia de las olas, la noche de verano, la música, que en esta ocasión, emergerá desde el propio mar.



Guillermo Fernández ofrecerá ‘Una hora entre dos aguas’, un auténtico espectáculo que situará el escenario en la conocida como ‘pata del muelle’, un pilar con dos siglos situado en medio del mar, frente a la costa de Cala Verde. Una ‘pata’ que soportó parte de la imponente infraestructura que se construyó para un moderno cargadero de mineral en el siglo XIX.



De esta forma, la historia y el arte, la belleza de lo antiguo y lo nuevo, la esencia del pasado y el presente, se fusionarán para dar Alma a una noche especial en la costa cuevana.



La esencia y el sonido del mar, la nocturna calidez y la belleza del pasado y el presente se fundirán en un concierto cuyo escenario, natural e histórico, será parte de las notas que arrancará de su guitarra Guillermo Fernández.



Es la primera vez en la historia de Cuevas, en la que entre el escenario y el público habrá mar. Será ‘Una hora entre dos aguas’, una hora de unión entre el pasado y el presente, de fusión entre el mar y la tierra, entre la música y las olas, de ritmo acompasado del corazón y el Alma.



La pata del muelle de Villaricos, que sigue emergiendo del mar, es el único vestigio visible que se conserva del moderno cargadero mecánico que se construyó en Marsella hacia 1914. Fue en ese año cuando se cambió el viejo método de carga mediante barcazas y pequeños muelles, reemplazándose por esta imponente estructura que acabó desmantelada después de 1957 cuando se cerraron las minas.



El transporte de mineral se realizaba a través del ferrocarril que construyó el célebre arqueólogo belga Luis Siret a finales del siglo XIX, y recorría tres kilómetros desde las minas de Las Herrerías hasta la costa. Se llevaba hasta siete grandes tolvas, desde donde una cinta transportadora, subterránea en parte, la llevaba hasta la vertedera móvil instalada al final del cargadero, que podía descargar hasta 3.000 toneladas de mineral en una jornada de 10 horas.



La ‘pata del muelle’ lleva ahí más de un siglo, fue soporte de una imponente infraestructura derivada del ingenio y la ingeniería para dar agilidad y funcionalidad al transporte de mineral… hoy, esa misma pata nos sirve de escenario para seguir enamorándonos de la historia, esa historia que siempre tiene una banda sonora… Imaginamos como sería la de entonces… la de hoy, en ‘Una Hora entre dos aguas’ no la vamos a imaginar, la vamos a sentir, nos va a transportar desde la orilla, desde el mirador de Cala Verde, hasta esa pata del muelle que cobrará vida entre los dedos de Guillermo Fernández.


“Desde hace bastante tiempo tenía en mente grabar un directo desde una isla o un paraje en mitad del mar. Quizás la nostalgia del escenario de los cruceros o el paso por las islas de El Caribe me influenciara. Tenía una idea en otra localización que aún sigue en mi mente para realizar, pero bien es cierto que desde el primer día que conocí la ‘pata del muelle’ lo identifiqué rápidamente como un escenario en mitad del mar y donde se podía realizar algo muy similar. Creo que puede ser una muy bonita noche de verano donde la música al compás de las olas y el sonido del agua pueden crear un ambiente muy mágico. Cuevas es un lugar con muchísimos recursos y a veces desconocidos. Creo que esta actividad puede ser otro granito de arena para hacerla más visible y que pueda ser visitada”, explica el músico.


Por su parte, el alcalde de Cuevas del Almanzora, Antonio Fernández, afirmó que cuando Guillermo le propuso la idea le pareció “muy interesante”. “Cuevas del Almanzora tiene una riqueza patrimonial, histórica y cultural muy grande y este concierto, además de ser muy novedoso, de no haberse hecho nada igual, puede ser una forma más de dar a conocer toda esta riqueza que tenemos”, asegura el primer edil quien añade, “estoy seguro que será una noche mágica, con ese escenario en mitad del mar, parte de nuestro patrimonio, y la música de Guillermo, creará un ambiente realmente inolvidable”.


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