G. M. / La Voz
07:00 • 07 oct. 2021
El entorno de la escultura denominada ‘Libertad’ levantada tras el asesinato de Rosa Galera a manos de su expareja y que homenajea a las víctimas de la violencia machista sirvió ayer como escenario donde se llevó a cabo una reivindicación que obtuvo el respaldo de decenas de vecinos de Fines y de otros puntos del Valle del Almanzora.
Este monumento situado en la localidad de Fines fue testigo en la tarde de ayer de la concentración convocada por la Federación de Asociación de Mujeres del Almanzora (Femaxi) en apoyo a la familia y la memoria de Rosa Galera y para mostrar su “total rechazo a la decisión judicial de otorgar un permiso penitenciario al asesino Óscar Perales, condenado a 21 años y 6 meses de prisión, cuando se cumplen 10 años de los hechos”. Desde Femaxi entienden que el permiso penitenciario es especialmente improcedente “más aún cuando, según el abogado de la familia -el asesino- no ha mostrado ningún tipo de arrepentimiento”.
Este monumento situado en la localidad de Fines fue testigo en la tarde de ayer de la concentración convocada por la Federación de Asociación de Mujeres del Almanzora (Femaxi) en apoyo a la familia y la memoria de Rosa Galera y para mostrar su “total rechazo a la decisión judicial de otorgar un permiso penitenciario al asesino Óscar Perales, condenado a 21 años y 6 meses de prisión, cuando se cumplen 10 años de los hechos”. Desde Femaxi entienden que el permiso penitenciario es especialmente improcedente “más aún cuando, según el abogado de la familia -el asesino- no ha mostrado ningún tipo de arrepentimiento”.
Reivindicación
El permiso penitenciario del que disfrutará el asesino de Galera marcó prácticamente todas las intervenciones que tuvieron lugar en el acto de ayer, entre las que se encuentra la de Julio Galera, hermano de la víctima y que acudió acompañado por otros familiares como su padre y la hija de Rosa, así como por la edil de Igualdad del Ayuntamiento.
Ante los asistentes, Galera reconoció no entender la decisión que ha llevado a que el asesino de su hermana pueda salir de prisión del 14 al 20 de octubre y pidió el “cumplimiento íntegro de la condena”. Unas palabras que, unidas a las del padre de Rosa, que agradeció la presencia y el apoyo recibido, son una clara muestra de cómo la violencia machista no sólo acaba con la vida de la mujer sino también de quienes la rodean, pese a los diez años transcurridos desde que Rosa fuese asesinada por su expareja. Por su parte la presidenta de Femaxi, la federación detrás de la convocatoria, ha explicado que desde este el ente “nos sumamos a la petición de la familia para que se cumplan las condenas íntegras y que no se den permisos cuando el asesino no ha mostrado ningún arrepentimiento”.
En este sentido, Remedios Serrano ha detallado que “queremos hacer ver a la sociedad que no solo hay una víctima; no solo le han quitado la vida a una mujer sino que esto tiene consecuencias y víctimas en toda la familia y en todo el municipio y la comarca, que ni olvida ni perdona”. Otra familiar de Rosa Galera, María Ángeles Martos, explicó cómo la familia lleva “diez años sin un día de descanso” por el camino judicial que se vieron obligados a emprender hace diez años y que ahora continúa con este permiso. La expresión más cruda de cómo la violencia de género no sólo deja muertes de inocentes por el camino sino de cómo puede marcar de por vida a toda una familia.
El permiso penitenciario del que disfrutará el asesino de Galera marcó prácticamente todas las intervenciones que tuvieron lugar en el acto de ayer, entre las que se encuentra la de Julio Galera, hermano de la víctima y que acudió acompañado por otros familiares como su padre y la hija de Rosa, así como por la edil de Igualdad del Ayuntamiento.
Ante los asistentes, Galera reconoció no entender la decisión que ha llevado a que el asesino de su hermana pueda salir de prisión del 14 al 20 de octubre y pidió el “cumplimiento íntegro de la condena”. Unas palabras que, unidas a las del padre de Rosa, que agradeció la presencia y el apoyo recibido, son una clara muestra de cómo la violencia machista no sólo acaba con la vida de la mujer sino también de quienes la rodean, pese a los diez años transcurridos desde que Rosa fuese asesinada por su expareja. Por su parte la presidenta de Femaxi, la federación detrás de la convocatoria, ha explicado que desde este el ente “nos sumamos a la petición de la familia para que se cumplan las condenas íntegras y que no se den permisos cuando el asesino no ha mostrado ningún arrepentimiento”.
En este sentido, Remedios Serrano ha detallado que “queremos hacer ver a la sociedad que no solo hay una víctima; no solo le han quitado la vida a una mujer sino que esto tiene consecuencias y víctimas en toda la familia y en todo el municipio y la comarca, que ni olvida ni perdona”. Otra familiar de Rosa Galera, María Ángeles Martos, explicó cómo la familia lleva “diez años sin un día de descanso” por el camino judicial que se vieron obligados a emprender hace diez años y que ahora continúa con este permiso. La expresión más cruda de cómo la violencia de género no sólo deja muertes de inocentes por el camino sino de cómo puede marcar de por vida a toda una familia.
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