La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Almería acogió este jueves la vista oral del juicio contra una presunta red criminal acusada de alijar 1,4 toneladas de resina de hachís en la orilla de Almerimar. La Fiscalía pide penas de cinco años y medio de prisión para seis acusados por una operación de narcotráfico perpetrada a las cinco de la madrugada del 7 de abril de 2021 en una playa de El Ejido, en las inmediaciones de un conocido chiringuito.
Una embarcación semirrígida se aproximó a gran velocidad a la playa, donde esperaban personas encargadas de la carga de la mercancía. En las inmediaciones se había colocado una furgoneta de una empresa de alquiler, así como un todoterreno propiedad de una mujer que no está acusada en el procedimiento.
La Guardia Civil irrumpió en el lugar para frustrar la operación. Según la acusación del Ministerio Público, las detenciones se produjeron en la playa y en el entorno donde presuntamente esperaban para alijar el hachís.
Uno de los arrestados fue descubierto “en el interior de un contenedor de obra próximo al lugar de los hechos portando consigo la llave de una Audi” propiedad de otro investigado. “El vehículo habría servido a los acusados para llegar al lugar de los hechos y cometer el ilícito”, según precisa la Fiscalía de Almería.
La Guardia Civil frenó la huida de los sospechosos y cortaron el paso a una furgoneta que otro acusado conducía. “Haciendo caso omiso a las señales luminosas y acústicas del vehículo policial, embistió el lateral izquierdo causando daños”. La persecución se realizó desde el aparcamiento del chiringuito hasta la Avenida de Almerimar y luego por la Autovía A7 hasta la salida 430 (Vícar-Roquetas).
El conductor, según este relato, no se detuvo. Tras realizar varias maniobras evasivas que pusieron en riesgo a agentes y otros vehículos, terminó por detener la furgoneta, se bajó y echó a correr para intentar sustraerse de la acción de los guardias civiles.
En el interior de esa Renault Master se amontonaban 47 fardos de arpillera con resina de hachís, mientras en el todoterreno identificado en Almerimar había otros dos paquetes con unos 30 kilos de peso cada uno, según consta en las diligencias del Juzgado de Instrucción número Cuatro de El Ejido.
Tres millones de euros
El juicio oral se desarrolló durante la mañana del jueves en el Palacio de Justicia de Almería y quedó visto para sentencia, según fuentes jurídicas consultadas por LA VOZ. La sesión se desarrolló sin que defensas y la Fiscalía alcanzaran un acuerdo, como se había planteado como posibilidad en jornadas previas. Se les imputa un delito agravado contra la salud pública y, en el caso del conductor de la furgoneta, un presunto atentado a agente de la autoridad.
El MInisterio Público solicita además multas económicas de más de cinco millones de euros. La droga estaba valorada pericialmente en 2,9 millones de euros en el mercado clandestino, según la toxicidad detectada en el laboratorio.
La lucha contra el tráfico de hachís en la costa de Almería se ha recrudecido en los últimos tres años con el desplazamiento de las redes tradicionalmente activas en el Estrecho de Gibraltar hasta el Levante.
La provincia sufrió durante la pandemia un importante aumento de los alijos de cannabis, que recupera el fantasma de la droga de principios de siglo. Solo los delitos contra la salud pública crecieron en los meses del confinamiento, según datos del Ministerio del Interior.
La operación en Almerimar fue desarrollada por agentes del grupo OCON Sur, en colaboración con unidades vinculadas a la Comandancia de la Guardia Civil de Almería. Este equipo nació del plan especial contra el tráfico de drogas en el Campo de Gibraltar (Cádiz).
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