Fallece Miguel Lorente tras más de cinco décadas como médico en el Almanzora

Miguel Lorente Carrillo ha fallecido a los 90 años de edad tras un largo y dedicado servicio a los vecinos del Valle del Almanzora, para los que trabajó como médico de familia más de cinco décadas.

'Don Miguel', como le conocían todos, nació en Tíjola en 1932, y fue algo más que un médico para el Almanzora, pero sobre todo para Olula del Río, donde su memoria perdurará por muchos años. Especialmente por la calle Los Dolores, en la que pasó consulta y donde levantó su casa junto a su mujer e hijos.

Por este motivo desde el Ayuntamiento de Olula del Río se han sumado a este luto. "Se ha ido el que ha sido el médico de todos. No podemos más que lamentar su pérdida y estar cerca de sus familiares y seres queridos a los que mandamos todo el cariño del mundo", han lamentado a través de sus redes sociales, donde vecinos de todos los municipios del Almanzora han mostrado su cariño y condolencias a la familia de Miguel Lorente.  

Para todos los vecinos y conocidos de este gran profesional, Don Miguel, fue mucho más que un médico de familia, aunque sus reconocimientos académicos tampoco se quedaron ahí y también fue nombrado académico el 21 de mayo de 2004, cuando ingresara en Granada como miembro de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Andalucía Oriental. 

Una perdida para la medicina, pero por supuesto, una pérdida que deja un gran hueco en el corazón y en la memoria de todo aquel que tuvo la suerte de toparse con Lorente. Los vecinos le recuerdan no solo como un médico, sino también como casi un amigo que velaba por la salud en todos los sentidos de toda la familia. "Nunca olvidaré como se portó con mis abuelos ya que estuvo hasta la última hora pendiente de ellos. Se ha ido un gran hombre", recordaba uno de los vecinos en sus condolencias a la familia.

Miguel Lorente no solo se encargaba de la salud pública de la comarca, sino que, a título privado, acudía a la casa de aquel que lo necesitaba, algo que se ha estilado en los pueblos pequeños y que deja el recuerdo de ese médico con maletín visitando directamente al paciente en la cama de su habitación. Esta cercanía con los pacientes quizás es lo que hace que los profesionales se conviertan así en mucho más para los enfermos y sobre todo para sus familiares.

El velatorio por el fallecimiento se celebró ayer por la tarde en Olula del Río. La misa y el funeral se celebrarán hoy martes a las cinco de la tarde y después será enterrado en Tíjola, de donde era natural.