Hay rincones en cada provincia de España a los que no llega el mar pero en los que se puede disfrutar de playas de agua dulce que se convierten en la mejor receta contra el calor para los vecinos de estos lugares a los que la zona de costa más cercana les pilla a decenas o cientos de kilómetros.
Con temperaturas como las que se han sufrido en muchos municipios almerienses, y también en el resto de España, a lo largo de la semana pasada y durante todo el fin de semana, encontrar un alivio para el calor cerca de casa es un recurso al que acuden muchos vecinos de los municipios de interior que no tienen problema en que el agua de su playa particular esté exenta de sal.
De este modo, desde la revista Viajar se han puesto manos a la obra para encontrar todas esas piscinas de interior que hacen posible no echar de menos el mar cuando se dispara el mercurio de los termómetros y entre las cinco mejores opciones de toda España se ha colado una almeriense.
La provincia
Se trata de la conocida como La Balsa de Cela, uno de los rincones "más desconocidos de la provincia", como destacan desde la publicación especializada en viajes y turismo, y que se encuentra ubicada en la "recóndita" localidad de Lúcar, entre la granadina Sierra de Baza y la de los Filabres. " La Balsa de Cela es una piscina natural (ubicada entre Cela y Tijola) cuyas aguas manan de un manantial termal a razón de cuarenta y dos litros por segundo y una temperatura constante de entre veintidós y veinticuatro grados", remarcan desde Viajar.
Pero eso no es todo, pues si faltaban alicientes para querer visitar este paradisíaco lugar, también se destaca que "la charca" se encuentra acondicionada con sus escaleras, chiringuitos de cocina tradicional y unos nada desdeñables 150 centímetros y dos metros de profundidad para el disfrute de toda la familia.
El resto de España
Y si la intención es visitar una de estas playas de interior fuera de los límites de la provincia de Almería, Viajar ofrece otras cuatro opciones que destacan como las mejores del país. Así, la primera son las Playas de San Juan, a 50 kilómetros de la capital madrileña, en el municipio de San Martín de Valdeiglesias, donde se encuentra el único embalse en el que está permitido el baño en toda la Comunidad de Madrid. "Es como una inmensa playa de interior, un mar de aguas dulces donde además del baño está permitida la práctica de numerosos deportes náuticos", destcan.
Por su parte, en Extremadura se encuentra la comarca de Las Hurdes, una zona de especial encanto en la que casi la totalidad de los pueblos y alquerías de la comarca cuentan con su propias piscinas naturales. "Destacan las charcas de Pinofranqueado que forman a su paso el río Ángeles y la alargada charca de Caminomorisco, alimentado por el caudal del río Alavea. Uno de los lugares más idílicos estos días la zona de puente de Casa de Palomero", subrayan desde la publicación de viajes.
Por su parte, en Sevilla la playa también es dulce y se encuentra en San Nicolás del Puerto, dentro del Parque Natural de la Sierra Norte. "Las limpias aguas del río Huéznar, que cauce abajo, allá por Constantina y Cazalla forma uno de los bosques galería más valiosos de la península, refrescan unas orillas acondicionadas para el baño y el esparcimiento", explican.
La última de estas particulares playas de interior se encuentra entre las provincias de Albacete y Ciudad Real y cuenta con hasta seis zonas diferenes para el baño. Son las Lagunas de Ruidera y en las que está permitido el baño son: la del Rey, Colgada, Santos morcillo, Salvadora, Redondilla y San Pedro.
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