Decenas de personas se han concentrado a las 11,30 horas de la mañana de este miércoles a las puertas de Hospital de Poniente de El Ejido para expresar su repulsa por la agresión a dos pediatras la tarde del martes en el servicio de urgencias del centro.
Como ha informado este periódico, el padre de un niño que había acudido a urgencias la emprendió a golpes pasadas las tres de la tarde con un médico “sin mediar palabra”, y a continuación agredió verbalmente a otra pediatra que se encontraba en el servicio.
Fuentes del propio hospital han destacado la brutalidad y violencia de la agresión física al pediatra, que ha sufrido heridas de distinta consideración en varias partes del cuerpo. El agresor fue detenido por las fuerzas del orden después de que personal del hospital dieran la voz de alarma por lo sucedido. Esta misma mañana estaba prevista la celebración de un juicio oral contra este individuo.
En la concentración del hospital ha estado presente Juan de la Cruz Belmonte, delegado territorial de Salud y Consumo, quien ha informado de que ha sido activado el protocolo sobre agresiones a personal de Salud y “el mecanismo de ayuda y protección” en él contemplado “contra este terrible" ataque.
Repulsa unánime
“Estamos aquí representantes de muchos hospitales y centros de salud de la provincia de Almería para expresar la repulsa unánime de todo el sistema sanitario ante una actitud ilógica y fuera de lugar. Tenemos los mejores profesionales sanitarios, dando lo mejor de sí, para que una persona, incomprensiblemente, bajo ningún tipo de justificación, pueda cometer una agresión física como esta”, ha dicho.
“Tenemos a los profesionales sanitarios para salvarnos la vida, para cuidarnos, y la sociedad tiene que entender que esto es un delito contra la autoridad, y así se va a perseguir y a juzgar. Esperamos una sentencia ejemplar para que no se vuelva a repetir”, ha añadido el delegado.
Belmonte ha precisado que en Almería no se producen “una cantidad muy excesiva” de agresiones, pero al mismo tiempo señala que “algunas personas no entienden la labor tan importante que hacen los sanitarios y por lo tanto no hay ninguna justificación para una agresión de este tipo”.
Por su parte, Francisco Cañabate, director médico del Hospital Universitario Poniente, ha informado de que la agresión se produjo cuando un padre entró en la consulta “y sin mediar explicación agredió físicamente a un pediatra y luego verbalmente a otra profesional”. Cañabate ha asegurado que el hospital brinda a los profesionales “todo el apoyo psicológico para que se sientan atendidos y valorados”.
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