“Ordenó a mujeres y niños irse... y puso las pistolas en una alfombra”

La Audiencia Provincial de Almería celebró este jueves la tercera sesión del juicio oral por el Crimen de Ossetia del Norte (Gádor, 2019). Se solicitan penas de hasta 40 años de prisión por un presunto asesinato consumado y dos tentativas.

La teatralidad propia de los procesos con jurado popular ofreció una imagen ilustrativa del devenir del caso. A un lado, los nueve miembros del jurado popular y los dos suplentes. Al otro lado, el fiscal, los abogados y los cuatro acusados intercalados entre ellos.

Con las manos apoyadas en el regazo, engrilletadas, sin hablarse, los cuatro agacharon la cabeza con el mismo rictus, casi ausentes, mientras el jefe de Homicidios de la Policía Judicial de la Guardia Civil reconstruía los pasos de una investigación que les incrimina como autores de la muerte de Juan José C. F. y de los disparos que hirieron a su hermano Salvador C. F.

El agente corroboró la versión de los testigos que sitúan a los miembros de Los Minos en aquella calle de Gádor, armados con armas largas y cortas. El brigada aludió a la recuperación de “munición de cinco armas distintas”  (casquillos y proyectiles no percutidos) y a una serie de conversaciones telefónicas donde miembros de la familia confirman la intención de agredir a Juan José C. F.

Los acusados alegaron que tenían armas para protegerse de posibles asaltos a sus plantaciones de marihuana, que tenían, al menos, desde 2015, cuando sufrieron “un incidente”. Según su lógica, eran armas defensivas y no ofensivas.

Sin embargo, la Guardia Civil asegura que lsa usaron para el crimen e incluso refirió la declaración de una testigo que dijo durante la instrucción que los acusados se “repartieron las armas” para atacar a la víctima. “Las pusieron encima de una alfombra”, confirmó a preguntas del letrado de la acusación, Mariano Garfias.

El cumpleaños

En la instrucción consta el relato de una mujer, testigo de los instantes previos al suceso, invitada a un cumpleaños de la familia de Los Minos en Ossetia del Norte. “Se extrae que estaba en el número 10 de la calle Ossetia del Norte con varias mujeres celebrando un cumpleaños. Antonio padre ordenó que las mujeres y los niños se marcharan de la casa mientras traía una bolsa negra que le caía en el costado con tres o cuatro pistolas”.

“Que antes de que se fuera de la casa pudo oír a Antonio padre hablando con sus hijos Antonio y Rafael diciendo que le iba a disparar en las piernas a Juan, su vecino, mientras ponía pistolas en una alfombra, y que después de escuchar los disparos pudo ver a Antonio hijo agazapado, portando una pistola”, añadió.

En este sentido, la Guardia Civil se une a las voces de los testigos y rechaza también que la víctima atacara previamente a los miembros de Los Minos. De hecho, Salvador C. F. llegó al centro de salud de Benahadux herido de bala en un glúteo y con el cuerpo de su hermano Juan José, ya fallecido, derrumbado sobre el asiento del copiloto de una furgoneta de color gris.

El juicio se retoma este viernes. Las conclusiones finales y los informes se realizarán la semana que viene, donde también se espera veredicto.