Un médico mojaquero es homenajeado en Murcia

El municipio murciano de Alcantarilla ha homenajeado a un médico mojaquero de nacimiento, que ha ejercido en la comunidad vecina durante más de 35 años. Se trata de Luis Carrillo Ramírez, de 68 años de edad, hijo del inolvidable don Diego Carrillo Flores, también médico, uno de las personas más entrañables y queridas en la historia reciente de Mojácar.

La mayor parte del desempeño profesional del doctor Carrillo ha transcurrido en el Centro de Salud Alcantarilla-Sangonera, donde participó en su puesta en marcha como médico de familia y donde también ejercicio como coordinador del propio centro.

Aunque actualmente sigue desarrollando su labor profesional en el Centro de Salud de Floridablanca (Murcia), en Alcantarilla, su ciudad adoptiva, se le tiene en gran consideración y cariño. Ese afecto ha propiciado que el Ayuntamiento decidiera rotular con su nombre la calle principal en la que se encuentra el centro de salud. En el acto de homenaje estuvo presente el alcalde, Joaquín Buendía, que tuvo palabras de agradecimiento para el profesional sanitario por toda su trayectoria. La propuesta de dar el nombre del doctor Carrillo a la calle fue aprobada por unanimidad en el Pleno de la corporación sustituyendo a la hasta ahora calle Mallorca. 

Luis Carrillo nació en Mojácar y era hijo del galeno Diego Carrillo Flores y de Rosalía Ramírez, quienes tuvieron a otros dos hijos: Rosa Carrillo Ramírez, enfermera, esposa del doctor y profesor Tesifón Parrón Carreño quien fue jefe de Servicio de la Consejería de Salud; y Carlos Carrillo Ramírez, también médico.

El homenajeado era también pariente del desaparecido ginecólogo turrero Blas Carrillo cuyo padre, Bartolomé Carrillo, era primo del suyo, Diego Carrillo.

Los Carrillo de Mojácar, una de las históricas familias mojaqueras con más influencia hace un siglo, tienen, entre sus antepasados recientes, a Blas Carrillo quien engendró doce hijos y fue el tatarabuelo de Luis, el médico galardonado en Alcantarilla.  Su abuelo, Ginés Carrillo, fue también médico y autor de muchas de las leyendas populares de Mojácar, como la de Walt Disney, que han llegado hasta nuestros días.

Luis suele pasar temporadas en Mojácar, en su chalet familiar de la Piedra Villazar, junto al Duende que construyera su abuelo hace casi un siglo.  

Una calle olvidada para su padre don Diego

Don Diego, si viviera (falleció en 2011), estaría orgulloso de su hijo, heredero de su sangre y de su vocación por la medicina como rama que de buen tronco brota. Sin embargo, Mojácar tiene una deuda pendiente con aquel don Diego médico rural, médico de pobres y de cortijeros, cuyas manos ayudaron a traer cientos de hijos de Mojácar a la luz tenue de un quinqué, y al que la leyenda le atribuyó, sin ninguna prueba de veracidad, ser hermanastro del universal dibujante Walt Disney.