El alcalde ve "llamativa" la "prisa" de la Junta para tirar el Algarrobico cuando "bautizó a la criatura"

El alcalde de Carboneras, el independiente Salvador Hernández (Gicar), ha tildado de "llamativa" la "prisa" de la Junta de Andalucía para proceder a la demolición del hotel de Azata del Sol en el paraje de El Algarrobico, ya que, según ha señalado, el inmueble inició su construcción con "todos los parabienes" de la administración autonómica.

"Me parece sarcástico porque la Junta fue la que bautizó a la criatura", ha señalado en declaraciones a Europa Press Hernández en referencia a la carta remitida este lunes por el consejero andaluz de Medio Ambiente, José Juan Díaz Trillo, al ministro Miguel Arias Cañete en la que le exige la "puesta en marcha" de la comisión de seguimiento contemplada en el protocolo firmado el 15 de noviembre de 2011 para recuperar la playa.

El regidor ha criticado que desde el Gobierno andaluz se esté "frivolizando" con los "intereses" de los vecinos de Carboneras y de los "potenciales trabajadores" del hotel y ha emplazado a "tirar de hemeroteca" para comprobar que el establecimiento "tuvo todos sus parabienes". "Es humor negro", ha apuntillado.

En esta línea, ha subrayado que resulta, a su juicio, "llamativo" que se esté "dando tanto prisa" para la "destrucción" del hotel y ha recordado que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) obligó a la consejería a elevar el nivel de protección en el paraje a suelo no urbanizable al considerar que la normativa del parque natural de Cabo de Gata-Níjar aprobada en 2008 podría dar "uso efectivo" al hotel.

"Ahora da la sensación de que están pidiendo explicaciones al nuevo ministro como si él hubiera tenido algo que ver con la construcción cuando el hotel fue bautizado por los gobernantes de la Junta", ha indicado.

Hernández, quien ha advertido de que se le está causando "un daño irreparable" al municipio, ha reiterado que desde el Ayuntamiento se sigue abogando por la apertura del establecimiento "como un ente productivo" y ha demandado que la comisión de seguimiento se constituya para abordar "soluciones que no sean directamente el derribo". "La destrucción no trae nada bueno", ha concluido.