Marta Rubí
23:21 • 19 abr. 2012
La polémica en torno al accidente sufrido por el Rey en un safari en Botsuana ha agitado la Casa Real, pero también a los periodistas expertos en cubrir y comentar la información de la Corona. Es el caso de la virgitana Carmen Enríquez, que fue corresponsal de la institución para TVE de 1990 a 2007 y comenta ahora su información en distintos medios. La también biógrafa de la Reina considera que se ha marcado un antes y un después en la transparencia de la Casa Real.
¿Coincide con sus compañeros de algunos medios en que las disculpas del Rey suponen un ‘gesto histórico’?
Es un gesto sin precedentes, desde luego, no solamente dentro del actual reinado, sino en la monarquía en general y en la mayoría de las monarquías. El rey ha rectificado una cosa que evidentemente había hecho mal y que había enfadado e irritado a la ciudadanía española.
Usted que conoce personalmente al Rey, ¿qué pensó al ver las imágenes de disculpa?
A mí me pareció una rectificación profunda, sincera, y desde luego creo que hay que tener mucho valor para hacer una cosa así. Realmente me conmovió muchísimo porque no es fácil de hacer. Y que una persona como es el Rey, que es una persona mayor, se enfrente a una cámara sabiendo que habla a millones de personas, diciendo “lo siento”, no es fácil.Creo que le honra, demuestra su grandeza y evidentemente es un gesto que podrían imitar de vez en cuando algunos responsables de otras instituciones cuando meten la pata.
¿Consiguió su cometido, calmar la irritación de los españoles?
Se ha dado el primer paso para recuperar la confianza. Hoy mismo (por ayer) me he enterado de que la Casa Real tomará otra serie de medidas, entre las que está comunicar los viajes que hace el Rey, a veces antes y otras veces después, porque es verdad que a lo mejor quien lo acompaña prefiere que no se diga. Se van a dar pasos en favor de la transparencia.
¿Es suficiente?
Hay gente que dice que tendría que haber explicado algo más. A mí me parece absurdo, todos sabemos a qué se estaba refiriendo. El Rey se ha desnudado delante de todos los ciudadanos españoles, no queramos meter más el dedo en la herida.
¿Cree que la imputación de Urdangarín y el accidente del nieto del Rey agravaron la crisis?
Yo creo que el error es el que es. En los otros hechos, el Rey no tiene culpa, pero su viaje..., es que ha sido muy inoportuno, muy desafortunado. Que no nos hayan informado el viaje hasta que se ha roto la cadera no es el error, es el remate. Lo que está mal es que haya ido en un momento como este. Si nos hubiéramos enterado antes, habríamos opinado antes que era una cosa inoportuna y no se tenía que hacer.
Usted es autora junto a Emilio Oliva del libro Los Príncipes. Preparados para reinar. ¿Debería tomar más protagonismo el Príncipe?
No. Mientras esté el Rey, tiene que tener simplemente protagonismo de heredero. Evidentemente, si el Rey no puede cumplir con sus actividades oficiales, el Príncipe le sustituye, pero no tiene que tener más protagonismo que el puramente accidental.
¿Coincide con sus compañeros de algunos medios en que las disculpas del Rey suponen un ‘gesto histórico’?
Es un gesto sin precedentes, desde luego, no solamente dentro del actual reinado, sino en la monarquía en general y en la mayoría de las monarquías. El rey ha rectificado una cosa que evidentemente había hecho mal y que había enfadado e irritado a la ciudadanía española.
Usted que conoce personalmente al Rey, ¿qué pensó al ver las imágenes de disculpa?
A mí me pareció una rectificación profunda, sincera, y desde luego creo que hay que tener mucho valor para hacer una cosa así. Realmente me conmovió muchísimo porque no es fácil de hacer. Y que una persona como es el Rey, que es una persona mayor, se enfrente a una cámara sabiendo que habla a millones de personas, diciendo “lo siento”, no es fácil.Creo que le honra, demuestra su grandeza y evidentemente es un gesto que podrían imitar de vez en cuando algunos responsables de otras instituciones cuando meten la pata.
¿Consiguió su cometido, calmar la irritación de los españoles?
Se ha dado el primer paso para recuperar la confianza. Hoy mismo (por ayer) me he enterado de que la Casa Real tomará otra serie de medidas, entre las que está comunicar los viajes que hace el Rey, a veces antes y otras veces después, porque es verdad que a lo mejor quien lo acompaña prefiere que no se diga. Se van a dar pasos en favor de la transparencia.
¿Es suficiente?
Hay gente que dice que tendría que haber explicado algo más. A mí me parece absurdo, todos sabemos a qué se estaba refiriendo. El Rey se ha desnudado delante de todos los ciudadanos españoles, no queramos meter más el dedo en la herida.
¿Cree que la imputación de Urdangarín y el accidente del nieto del Rey agravaron la crisis?
Yo creo que el error es el que es. En los otros hechos, el Rey no tiene culpa, pero su viaje..., es que ha sido muy inoportuno, muy desafortunado. Que no nos hayan informado el viaje hasta que se ha roto la cadera no es el error, es el remate. Lo que está mal es que haya ido en un momento como este. Si nos hubiéramos enterado antes, habríamos opinado antes que era una cosa inoportuna y no se tenía que hacer.
Usted es autora junto a Emilio Oliva del libro Los Príncipes. Preparados para reinar. ¿Debería tomar más protagonismo el Príncipe?
No. Mientras esté el Rey, tiene que tener simplemente protagonismo de heredero. Evidentemente, si el Rey no puede cumplir con sus actividades oficiales, el Príncipe le sustituye, pero no tiene que tener más protagonismo que el puramente accidental.
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