El verano es la estación más larga del año y la preferida por muchos. Es tiempo de vacaciones, días de playa y piscina, de quedadas con amigos y largas veladas en terrazas y restaurantes y de disfrute y desconexión.
LA VOZ te propone siete visitas en la provincia de Almería para vivir y exprimir a tope este verano.
San José (Níjar)
El Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar es uno de los destinos preferidos por todos, almerienses y turistas. Dentro de este, el núcleo de San José ocupa un lugar destacado. Se ha convertido, verano tras verano, en el punto neurálgico de este espacio natural y es considerado su 'capital'.
Su población se triplica o cuadriplica durante los meses estivales. Establecimientos de restauración, tiendas, puestos de artesanía dan vida a este pequeño núcleo de la costa de Almería, que se encuentra rodeado por un entorno natural privilegiado. Y es que muy cerquita se encuentran dos de las playas más famosas de Cabo de Gata, la de Mónsul y Los Genoveses.
Garrucha
Con sus casi ocho kilómetros por metro cuadrado, este pueblo pesquero (quizás de los más desconocidos del Levante almeriense) es conocido principalmente por su gamba roja. Lo incluimos en este listado como sugerencia para degustar pescado fresco.
Pulpí
Seguimos en el Levante almeriense y nos paramos en uno de los municipios almerienses limítrofes con la Región de Murcia, Pulpí. Menos conocidas que otras pero no menos espectaculares, en él encontramos playas como Los Cocedores, Mar Rabiosa, Mar Serena o Calipso en las que disfrutar del verano.
A este atractivo natural, se le suma otro: su famosa Geoda, que desde hace unos años es visitable.
Roquetas de Mar
En el municipio con más plazas hoteleras de la provincia, encontramos una rica y variedad oferta de restauración, ocio y diversión. Cabaret Festival y A pie de calle enriquecen la programación veraniega del segundo municipio en población de Almería, pero que en verano duplica su número de habitantes.
Almócita
Es, sin duda, uno de los municipios más activos de la provincia de Almería. Su apuesta por el turismo, el medio ambiente, las tradiciones y la cultura lo convierten en una cita obligada si visitas este verano la Alpujarra en su vertiente almeriense.
Padules
Un conocido portal de turismo rural lo definía como un oasis en la Alpujarra almeriense. Las Canales de Padules se han convertido en uno de los lugares de referencia del interior durante todo el año, pero especialmente durante la época estival.
Declaradas Monumento Natural en 2019, no dejan indiferente a nadie por su espectacularidad belleza. En este paraje, en un tramo de unos 2 kilómetros, puede apreciarse cómo el río Andarax ha modelado los relieves carbonatados que enlaza la umbría de Sierra de Gádor con la solana de Sierra Nevada. Saltos de agua, cañones o cerradas, pozas y estructuras caprichosas se suceden a través de una poco habitual y enmarañada vegetación de ribera, compuesta por fresnos, álamos, sauces, gayombas, zarzamoras...
Lúcar
Las altas temperaturas y disponer de más tiempo libre y de ocio nos llevan cada año a refugiarnos en playas y piscinas, pero también podemos optar por una zona de baño natural. Es lo que podemos hacer en el Almanzora en la Balsa de Cela, un manantial de aguas termales situado en el interior de la provincia.
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