Ana Almansa Martínez, conocida en su pueblo como Ana Mari, defendió el papel enriquecedor de la migración para la Villa de Turre con más de 4.000 habitantes y con una marca turística en torno a Sierra Cabrera, Cortijo Grande y a la gastronomía sin olvidar la calidad de sus eternas morcillas. “Turre, un pueblo del que muchas personas tuvieron que migrar, hoy recibe a ciudadanos y ciudadanas de diversos lugares del mucho. Confío en que nuestro carácter inclusivo e igualitario deje su impronta”. “Soy hija de Andrés el Parralero y de María la de La Luz. Me vais a permitir que tome como ejemplo de turreros a mi familia, genuinamente turreros, con 'Ocho Apellidos Turreros, a pesar de haber venido de otros lugares de la provincia de Almería hace ya casi un siglo”. “Mis abuelos paternos, Pepe y Rosario, llegaron primero a Las Alparatas y luego a Turre. Fue el trabajo de mi abuelo (las parras, de ahí lo de ´Parralero´) lo que les trajo a esta comarca. Mis tíos y tías Josefa, Pepe, María y Paco, junto a mi padre, Andrés, serían la primera generación que creció en Turre. Y mis abuelos maternos, Juan y Ana, llegaron también por trabajo; mi abuelo era el electricista, por eso lo de ´La Luz´. Mis tíos y tías Isabel, Carmen, Juan, Ana y Ángel, junto a mi madre, María, son ya turreros de nacimiento, en algunos casos”. Tuvo un gesto sensible y emotivo para su hermana, Rosario, fallecida recientemente y cuya pérdida significó que toda Turre, Garrucha y Huércal Overa donde en los últimos años fue directora de la guardería huercalense. “En el Paleolítico ya vivía el ser humano en nuestro territorio, pero no fue hasta un año después del Descubrimiento de América, en 1493, cuando se formó el núcleo urbano.
Más de un siglo después, en 1596, por Real Privilegio de Felipe II, nacía oficialmente Turre. En el siglo XIII, la Comarca del Levante Almeriense vivió momentos convulsos y se construyeron fortificaciones y torres vigías. Aquí había una, que fue la que dio el nombre a Turre. Cuando Felipe II, con sus huestes se detuvo…recreaba mi hermana en un poema publicado en un libro de la Feria de Turre hace unas décadas”…”. La doctora Almansa Martínez homenajeó a sus primeros maestros/as que le enseñaron a aprender desde el colegio de Turre y el Instituto de Vera. Aún recuerdo el primer día de clase con Doña Custodia. Resulta difícil nombrar a todos los compis de pupitre. Una buena parte de aquella generación vivimos fuera, pero siempre volvemos. Recuerdo las clases con Don Paco, con Doña Carmen Nieves, con Doña Isabel, con Don Gabriel, con Doña Josefina, con Don Manuel… Y también recuerdo lo contentos que estábamos cuando nos fuimos al instituto de Vera (la mayoría, a El Palmeral, que estrenamos en aquellos años); y éramos los turreros de los estudiantes que mejor preparados estábamos. Menudos madrugones nos pegábamos, para llegar a Vera a primera hora, en Autocares Baraza. En el instituto tuvimos la posibilidad de relacionarnos con personas de los pueblos de la comarca y ahí nacieron amistades que continúan al día de hoy. No quiero dejar de mencionar a mi amiga Antonia Navarro (la hija de Antonio y Luisa, mis vecinos de Los Gallardos, actualmente funcionaria del Instituto Cervantes con experiencia en varios países), de familia de origen turrero, y a Paqui Martínez, de Garrucha, nieta de la Turrera”.
Ana Almansa se afincó en Málaga hace un cuarto de siglo, pero siempre que alguien le pregunta de dónde es, lo tiene claro y no como algunas personas que para presentarse te dicen que son de pueblo y ya está. Ana y este periodista nos parecemos bastante en señalar por delante de todo el nombre del pueblo. “Presumo de ser de Turre, siempre llevo a mi pueblo por bandera, allá por dónde vaya. Incluso bromeo diciendo que mi despacho es un trocito de Turre en Málaga, en el que hay fotos, algunas postales y un cartel de la Feria de Turre de 1989, obra del pintor Francisco Haro”. Este periodista ha pasado por ese despacho y la señal de Turre está por todas partes. Coordinadora del Doctorado en Comunicación y del Máster en Dirección Estratégica en Comunicación en la Universidad de Málaga, colaboradora en el Master en Comunicación Social de la Universidad de Almería, hemos compartido tribunal de tesis doctorales por distintas universidades y el nombre de Turre y Los Gallardos han sido subrayados. La investigación de la doctora Almansa la ha llevado a diversos lugares del mundo.
El periodismo apareció en la noche de Turre. Fue directora de Comunicación del Ayuntamiento de Vera. Estuvo en Vera Comunicación, en la emisora Onda Mediterráneo, dirigida por Gabriel Sánchez Ogayar, con sede en Los Gallardos, impulsada por el consorcio de Sierra Cabrera, presidido por el exalcalde de Turre Francisco Sánchez Haro, panadero. También pasó por Argar TV y fue corresponsal de la comarca del Levante de Ideal y La Voz de Almería. “En los años 90 se produjo en nuestra comarca un desarrollo de la comunicación local. En este auge seguro que tuvo mucho que ver Antonio Torres, del vecino pueblo de Los Gallardos, director de Canal Sur Radio y Televisión Almería durante décadas, que ha sido y es un ejemplo para quienes aman la profesión. Manolo León, de Garrucha, o yo misma (humildemente), también contribuimos a este desarrollo. Después han venido muchos más, afortunadamente” dice una profesional con alma y talento.
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