Cajamar adjudica a un equipo de Almería su nueva sede en el PITA

Con la adjudicación del proyecto para la construcción de la nueva sede de Cajamar en el Parque Tecnológico e Industrial de Almería (PITA) se pone en marcha la maquinaria que permitirá abrir esas instalaciones en un plazo que rondará los dos años.
Finalmente, y después de discernir entre los veinte proyectos que se presentaron inicialmente, ha sido un equipo almeriense, el Estudio Arapiles Arquitectos, el que se ha llevado el gato al agua y será el encargado de definir el conjunto del inmueble y de desarrollar la dirección de obra para la construcción del edificio.
Cajamar, a través de su portavoz, Manuel Gutiérrez Navas, aseguraba ayer tras dar a conocer el resultado del concurso que realmente “la decisión ha sido muy complicada porque el nivel de los tres finalistas, y del resto de los equipos que se presentaron a esta convocatoria, ha sido impresionante”. Esa igualdad hizo que el ganador lo haya sido por un muy estrecho margen.
Un edificio singular
El nuevo edificio, que será sede de las empresas participadas por Cajamar y de aquellas que le prestan sus servicios, dispondrá de cinco plantas con un total de 18.000 metros cuadrados construidos. En su interior albergará espacios de oficinas, salas de reuniones y juntas y zonas de trabajo capaces para dar cobijo a algo más de 730 empleados.
Pero la capacidad real se sitúa en torno a las 1.100 personas, contando con el personal que de forma eventual acudirá a este centro financiero y tecnológico para acciones formativas u otras actividades propias de la entidad financiera almeriense, una actividad formativa importante tras la incorporación de otras rurales españolas al grupo almeriense.
Innovación y conocimiento
El objetivo de Cajamar es utilizar esta nueva sede para albergar las empresas instrumentales del Grupo Cajamar dedicadas básicamente a la innovación y a la aplicación del conocimiento. Esas empresas se distribuirán en cuatro de las plantas dotadas con salas de reuniones, salas de formación, servicios, laboratorios o talleres de prueba, archivos documentales y almacenes.
La caja rural almeriense ha pensado también en el confort de los trabajadores y, para ello, ha incluido en sus exigencias de cara al proyecto la construcción de una cafetería-restaurante, una sala de descanso, una guardería para los hijos de los trabajadores y zonas verdes situadas en el entorno y el interior del inmueble.
La inversión prevista en la fase constructiva de la nueva sede ‘tecnológica’ de Cajamar en el PITA superará los 15 millones de euros, cantidad a la que hay que sumar el millón de euros que supuso el acuerdo de compra de las dos parcelas sobre las que se asentará el edificio proyectado.
Los planes de la entidad pasan por tener listo el proyecto ya definitivo, realizadas las correcciones que se consideren oportunas, para el mes de septiembre, fecha en la que se solicitaría la licencia municipal para iniciar las obras a principios del año que viene, con un plazo de ejecución que será de 18 meses.