Un total de once iglesias mudéjares de la provincia forman parte de una propuesta de inscripción en el Catálogo General de Patrimonio Histórico Andaluz de manera colectiva. Se trata de las de Alsodux, Bacares, Benizalón, Bentarique, Enix, Íllar, Padules, Rágol, Santa Cruz de Marchena, Terque y Velefique.
La propuesta tiene fecha de octubre de 2011 y la competencia para la formación y conservación del Catálogo la ostenta la Consejería de Cultura, siendo la Dirección General de Bienes Culturales el Centro Directivo encargado de dicha función, a través del Servicio de Protección del Patrimonio Histórico, que debe hacerse cargo de la redacción y de la custodia de la documentación correspondiente a los bienes culturales que constituyen el Patrimonio Histórico Andaluz.
En la provincia de Almería, se conservan un importante número de edificios religiosos construidos entre los siglos XVI al XVIII que responden a una estética y una tipología denominada mudéjar. En la mayoría de los casos estos inmuebles han mantenido su estructura original, aunque también podemos observar algunos de ellos con las modificaciones y añadidos que les ha otorgado el paso de los años.
En la zona de la Alpujarra
Edificios situados en la zona de la Alpujarra, hay que encuadrarlos dentro del programa de edificios de carácter religioso surgidos tras la conquista del Reino de Granada por los Reyes Católicos. Era necesario edificar una gran cantidad de iglesias en aquellas zonas, con una importante presencia de población morisca, y dada la escasez de medios , se recurre a un esquema sencillo en el que predominará en la gran mayoría las plantas de cajón rectangular, los muros de mampostería y las cubiertas denominadas de armadura mudéjar, sin duda uno de los aspectos más destacados y donde se concentrarán los detalles decorativos que le confieren a estas construcciones sus sellos más representativos, explican desde la Delegación de Cultura de la Junta.
Reformas poco estéticas
Pero el paso del tiempo no ha tratado con demasiada justicia estas iglesias y tampoco han estado muy afortunadas algunas de la reformas y rehabilitaciones que se han realizado en ellas. Es el caso de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Alsodux, en cuya fachada se realizaron trabajos hace más de 30 años y que dejaron escondidas bajo el cemento las piedras originales de su construcción.
Este bonito edificio, que se levanta, además, sobre una antigua mezquita árabe, conserva en su interior algunos de sus elementos originales, como es el caso de los techos de madera, pero en su fachada principal han quedado ocultos por el trabajo de la mano del hombre, más preocupado de conservar en pie la iglesia que de mantener la estética original de los materiales.
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