El Tribunal Supremo ratifica una condena de doce años por agredir sexualmente a una niña

El Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la pena de 12 años y seis meses de prisión impuesta a un hombre de 36 años que violó a una niña de diez años que iba habitualmente a jugar con el hijo de la familia en cuya casa residía al tener alquilada una habitación.

El Alto Tribunal desestima el recurso de la defensa del acusado contra la resolución de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Almería que le condenó como autor de un delito de agresión sexual. El acusado deberá indemnizar, asimismo, con 30.000 euros a la víctima, a quien no podrá acercase durante 15 años a menos de 500 metros.

Según consta en la sentencia, el hombre, natural de Mali y conocido con el apodo de ‘Bola’, tenía alquilada una habitación desde 2010 en una vivienda de la barriada de Cortijos de Marín, en Roquetas de Mar.

Relación de amistad
La familia arrendataria de la casa tenía relación de amistad con la familia de la víctima, por lo que ella solía ir dos o tres veces en semana “para hacerse trenzas” y a jugar con el hijo menor de edad.

En un día indeterminado de septiembre de 2010, cuando ambos estaban jugando al escondite, el niño entró en la habitación del acusado, que se encontraba en el interior, y se escondió dentro del armario.

La víctima le siguió y cuando se encontraba en la estancia, el agresor, con la intención de satisfacer sus “ánimos libidinosos”, la retuvo cogiéndola fuertemente para que no pudiera salir al tiempo que le decía al menor que se fuera.

A continuación, cerró la puerta y consumó el ataque sexual, aunque ella pudo zafarse mordiéndole la mano. Antes de que escapase, el acusado la amenazó diciéndole: “como lo cuentes verás”. La madre de la víctima denunció los hechos dos meses después.

La sala de lo Penal del Tribunal Supremo destaca que su declaración fue la “misma en lo esencial”, tanto en instrucción como en la vista oral, y que el relato es “creíble”, a lo que añade que las periciales corroboran su versión frente a la del procesado, que sostuvo en el juicio que tenía una relación de enemistad con la madre de la víctima.