La Junta teme a que la crisis y el paro promuevan actitudes xenófobas

El Observatorio Permanente Andaluz de las Migraciones (OPAM), órgano dependiente de la Consejería de Justicia e Interior, presentó ayer un informe anual 2011. El documento analiza la situación de los inmigrantes en la comunidad autónoma (uno de cada cinco inmigrantes vive en Almería) y presta especial atención a la incidencia de la crisis económica en factores como la inserción laboral, los flujos de población y la imagen de los andaluces sobre el fenómeno migratorio. br>
Según el informe, los andaluces “han sabido mantener una postura bastante equilibrada en materia migratoria”, aunque la crisis económica “pone a prueba el talante humano y las virtudes cívicas”. El OPAM teme que el desempleo creciente pueda promover actitudes xenófobas. “La población autóctona demanda ajustar la regulación de los flujos migratorios al desfavorable escenario económico, pero sin “descargar” en los forasteros la frustración que este pudiera causarle”, explica el documento”. “Sin embargo, no podemos presentar aquí un diagnóstico completo, ni tampoco nos atrevemos a garantizar su estabilidad incondicional de cara al futuro”, añade. En Almería las cifras recogidas en el estudio del OPAM y la Dirección General de Coordinación de Políticas Migratorias de la Junta de Andalucía revelan los efectos de la crisis sobre la población extranjera asentada en la provincia. El número de inmigrantes desempleados creció un 10 por ciento en un año (actualizado a final de 2011), con una menor “demanda de mano de obra en tareas agrícolas”, y se produjo “un acusado desplome del ritmo de crecimiento anual de la población extranjera en Almería”.

La imagen pública

Además, las encuentas de opinión reflejan el deterioro de su imagen. “Las apreciaciones se han vuelto ambiguas sobre todo en aspectos relacionados directamente con la participación de los inmigrantes en el mercado laboral y los criterios de acceso a determinados bienes públicos, arrastrando a la baja la valoración general del hecho migratorio, en términos de costes y beneficios para la sociedad de acogida”, analiza el OPAM. br>
No obstante, el Observatorio asegura que todavía “la degeneración no es generalizada” y añade que hay motivos para la “esperanza”, para que “la prueba” de la crisis “se supere con éxito”.