Siete años de cárcel por herir a un empleado para robar dos botellas de whisky

Dos botellas de whisky Johnny Walker etiqueta negra de 12 años valen en las tiendas unos 50 euros. Sin antecedentes penales y en las condiciones actuales del Código Penal, hurtarlas de la estantería de un supermercado puede suponer poco más que un breve paso por el "cuartelillo" y una multa económica.

Sin embargo, de la delincuencia más básica a un grave problema de seguridad ciudadana hay, en ocasiones, un paso. Un vecino de Roquetas de Mar lo dio y hoy se enfrenta a una pena de siete años y dos meses de cárcel por delitos de robo con violencia y lesiones, según una sentencia dictada por el Tribunal Supremo (TS).

Los hechos se remontan a febrero de 2008, en un conocido supermercado de Aguadulce. El acusado (acompañado por un chica) entró en el establecimiento, se dirigió hasta la zona de las bebidas alcohólicas y cogió dos botellas de whisky. Un empleado observó como se las guardaba debajo de la ropa, de una chaqueta, y lo interceptó cuando se encontraba en la puerta de la tienda. Fue ahí donde una falta de hurto se convirtió en dos delitos.

Según la sentencia del TS, el ladrón increpado por el dependiente sacó un cúter y le produjo severos cortes en el brazo izquierdo.  Mientras el imputado se enfrentaba con un segundo trabajador, la chica llevó las botellas sin demora a unos ‘amigos’ que esperaban en un vehículo estacionado en las inmediaciones.

Lesiones

Entre las lesiones causadas constan un corte profundo en el antebrazo (le dieron 18 puntos de sutura). La víctima estuvo dos días ingresado por la pérdida de sangre y la gravedad de las heridas.

El caso llegó inicialmente a la Audiencia Provincial de Almería. La Sección Primera impuso penas de tres años y ocho meses por el robo con violencia y tres años y seis meses por las lesiones. El recurso presentado al Supremo no consiguió su propósito. El Alto Tribunal mantiene el pronunciamiento.